OPINION

Pet Cementery II: Accesorios taxidérmicos, una moda en vía muerta

animales-1
animales-1

Existen dos formas de honrar a las mascotas que han pasado a mejor vida: teniéndolas presentes en el pensamiento o teniéndolas presentes en el salón, en forma de animal disecado. El diseñador de moda Reid Peppard ha pensado que uniendo ambos modos de recuerdo se puede hacer algo "bonito".

Para ello ha creado una línea de complememntos de moda realizado con los cadávares embalsamados de los animales de la casa. Peinetas con medio torso de cobaya, gemelos a partir de cabezas de hámsteres, suaves monederos con el cuerpo de un conejillo de indias...incluso una pajarita "de rata" ("corbatín de cuero negro con cabeza de rata blanca en el medio y con ojos azules de cristal de Swarovski").

Lo más suave que tiene Reid Pimienta en su colección es una diadema a lo Poca-Hontas con las alas cercenadas de una paloma...Viendo al diseñador mostrando sus complementos, que luce como si acabarán de regresar de unas vacaciones en la ultratumba, nos imaginamos a más de una tribu urbana que aplaudirá este peregrino concepto de moda taxidérmica.

A nosotros nos huele un poquito como una jaula de hámster sin cambiar la arena desde hace años. Pero la gente es muy libre de ponerse a su gato muerto por montera para darse una garbeo.

Cómo hizo el pasado verano la artista la artista holandesa Tinkebell, que se confeccionó un bolso a partir de su gata muerta y colgó en Internet las instrucciones para que otros hicieran lo mismo. Por supuesto, recibió una avalancha de correos tachándola de mujer de dudosa catadura moral.

Tinkebell, lejos de dejar a su gata descansar en paz, recopiló toda la información posible sobre los que mandaron los correos y escribió un libro con los insultos más divertidos y amenazantes que tituló "Eres una pervertida jodida hija de puta".

Tinkebell reconoció en una entrevista que su gata Pinkeltje no murió de causas naturales sino que ella mismo la mató con sus propias manos porque "estaba deprimida y odiaba estar sola. Así que la convertí en un monedero para que pudiera llevarla a todas partes conmigo".

Después de este pequeño detalle, el título del libro nos parece hasta suave. A su lado las creaciones de Reid Peppard quedan hasta chulas...siempre que los animales no hayan sufrido en su elaboración, claro.

La web de Reid Peppard y sus ex-animales

Mostrar comentarios