El veneno de un taipán adulto puede matar a 12 personas o a 50.000 ratones.
Lawrence, un criador de serpientes de Miami, tenía todas las papeletas para haber muerto el 11 de septiembre de 2001. Ese día fue mordido por un taipán que acababa de importar de Austrlia. El taipán está considerado como una de las serpientes más venenosas del mundo. Sólo dos laboratorios de Estados Unidos disponían de un antídoto contra el veneno de aquel ofidio: uno estaba en Nueva York y el otro en San Diego.
La opción neoyorquina hubiera sido la más razonable, “sólo” 1.800 kilómetros al norte de Miami, si no hubiera sido por los atentados que aquella misma mañana asolaron Manhattan y que provocaron el cierre del espacio aéreo de Estados Unidos. Por ese mismo motivo, la opción de San Diego quedaba descartada, de modo que Lawrence estaba condenado a muerte, según relata el documental de Discorery Channel “I was bitten” (“Fui mordido”), que puede verse en Internet.
Si Lawrence logró salvar la vida fue gracias a un amigo suyo, el médico Al Cruz, quien puso todo su empeño en que el antídoto llegara desde la lejana San Diego (3.650 kilómetros), en el único avión civil que fue autorizado a volar aquel 11 de septiembre de infausto recuerdo.
El veneno del taipán puede matar a un hombre en menos de una hora. La ambulancia tardó 40 minutos en llegar al hospital, de modo que el margen de maniobra era mínimo. El veneno afecta al sistema nervioso, al corazón y a la sangre, provocando un fallo general del cuerpo. Los médicos lograron mantener con vida al paciente gracias a un antídoto general mientras viaja por vía aérea el antídoto específico del taipán, sintetizado a partir del veneno de la serpiente.
Finalmente, y gracias a las gestiones del equipo médico, el antídoto llegó a su destino y Lawrence salvó una vida que parecía condenada. El documental deja una cuestión en el aire: ¿volaba ya la nave camino a Miami cuando el resto de los aviones fueron obligados a aterrizar o se autorizó ex profeso su despegue para salvar al hombre?
Visto en Discovery Channel vía Reddit.
El 11-S, diez años después:
-Los atentados del 11-S no provocaron terror sino que multiplicaron la ira por diez
-El juego de cartas Illuminati que anticipó el 11-S.
-El ataque contra las Torres Gemelas, estampado en una alfombra
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