La persona que aparece en esta imagen montando en bicicleta de manera invertida, con la cabeza en el sillín y unas cuerdas atadas a sus pies para impulsarse con los pedales, es un recién jubilado chino que frecuenta un parque público donde se reúnen los mayores cerca de la estación metropolitana de la ciudad de Cantón, en China.
Es común en el país asiático ver a muchas personas mayores que se levantan por la mañana para visitar los parques públicos, donde realizan ejercicios matinales o practican disciplinas como el tai-chi, para mantenerse en forma en los años dorados de su vida.
Pero lo de este hombre supera a todas las tablas de ejercicio en vitalidad y dificultad, pues en realidad, además de la "bici-invertida", también pone en práctica otra variedad de actitudes únicas que lo mantienen fresco como un chaval y que le han valido que la gente se desplace al parque sólo para verle practicar.
Entre sus habilidades, que recuerdan bastante a las del maestro Mutenroshi, el "Duende Tortuga" de "Dragon Ball", están pasarse varios minutos haciendo el pino con una sola mano o colgarse de la tapia como un murciélago para beber un litro de agua en contra de la gravedad, algo que sin duda no recomendarían 9 de cada 10 nutricionistas.
También gusta de cincelar ladrillos a golpes con su mano extendida.
Sin embargo, lo de montar en bici de manera invertida supera con creces las anteriores destrezas, pues hay que tener en cuenta que no sólo debe controlar el equilibrio del cuerpo, sino también mantener la dirección de la bicicleta con el sentido espacial cambiado.
Un crack. Sin duda.
Vía/fotos: bbs.o.cn
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