Todos hemos escuchado alguna vez eso de que el tamaño de los pies está directamente relacionado con el tamaño del miembro viril. Aún no se sabe si es causa de la vanidad o la falta de conocimiento de algunas personas, pero el hecho es que a muchos varones de pies grandes les agrada pensar que realmente es así.
Bienvenidos al mundo real, señores zapatones: relacionar el tamaño de la extremidad con la elongación de nuestro amigo íntimo es como rebozar churros con harina. El tamaño, tanto del pie como del miembro, es una cuestión de genes y no guarda proporcionalidad.
Afortunadamente, tenemos a los urólogos para desmentir la creencia, los valientes hombres y mujeres que con tesón exploran las regiones inferiores de una ciencia que la mayoría de nosotros nunca se atrevería a pisar, pero sí a hablar de ella desde la distancia.
Y no son pocos los estudios que han buscado la evidencia empírica de la relación de tamaño de ambas partes del cuerpo. Sin encontrarlas.
Comenzando por 1993, en que dos médicos del Hospital Monte Sinaí de Toronto, Canadá, midieron la altura, el tamaño de los pies y la longitud del pene poco estirado (o "morcillón" que se le dice) de 63 hombres.
La longitud del pene se vinculó a la altura y al tamaño de los pies, pero la correlación fue muy débil. Tan débil que los investigadores ganaron en 1998 el Premio Ig Nobel de Estadística por su estudio "The Relationship Among Height, Penile Length, and Foot Size.". Bien merecido, sin duda.
En 1999, investigadores de Corea del Sur, preocupados por lo que se decía por ahí de la raza asiática (pies peques-pene peque), midieron la longitud y la circunferencia de 655 penes flácidos de los hombres de su nación, así como el tamaño de sus pies, la longitud de sus dedos de los pies y los dedos de la mano, el tamaño de sus orejas, la boca e incluso la cantidad de pelo que tenían en la cabeza.
Lógicamente, se encontró una correlación débil entre la longitud del pene y la circunferencia de éste. Pero no con cualquiera de las otras mediciones; ni siquiera con la de los dedos largos, otro de los bulos sobre la proporcionalidad del bajo vientre más extendidos.
Sí se encontró que la circunferencia del pene podría estar un poco relacionada con la altura, el peso y la longitud de los dedos tercero y el primero, pero no bastaba para que los científicos concluyeran nada más allá de un sonoro "el tamaño o las características de las extremidades del cuerpo no es suficiente para predecir el tamaño del pene".
Para confirmar la falta de evidencia en las razas caucásicas (junto con los africanos, los a priori mejor parados en la ruleta de los penes grandes) en 2002 un estudio realizado en el hospital del University College, en Londres, midió los penes y los pies de 104 hombres británicos de pelo en pecho. Lo han adivinado, tampoco encontraron correlación alguna.
Así que ya saben, la próxima vez que compartiendo una bebida espirituosa con los amigotes se pongan a comparar el tamaño de las zapatillas con la hombría de cada uno, piensen en el percebe, un animal del que no nos separan muchos genes y que es el que tiene el pene más largo del reino animal: 1´5 veces la longitud de su cuerpo. Y ni siquiera tiene pies.
Fuentes y fotos:
"The Relationship Among Height, Penile Length, and Foot Size
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