El canibalismo ocurre en todo el reino animal en muchas poblaciones silvestres. Pero dentro de las poblaciones en cautiverio, el canibalismo se percibe como un comportamiento anormal y sus mecanismos subyacentes son poco conocidos.
En aves de corral, el canibalismo ocasiona grandes daños. De hecho es una de las principales causas de mortalidad entre las gallinas ponedoras. Y la evidencia sugiere que el comportamiento caníbal de estos animales en los corrales es una respuesta aprendida que se ve reforzada por la observación de otras gallinas que lo realizan. Pero que tiene una base que no deja de ser bastante nutritiva.
La técnica más común utilizada para reducir la conducta caníbal en las gallinas ponedoras es recortarles el pico, un proceso mediante el cual las puntas de los picos se eliminan para evitar que las aves sean capaces de realizar graves escabechinas con sus congéneres.
La inquietante recortadora de picos de pollo.
A pesar de ser una práctica común, el recorte del pico no es una solución adecuada al problema, ya que pruebas de comportamiento neurológico en gallinas han sugerido que es peor el remedio que la enfermedad, ya que causa un dolor agudo y crónico, conduce a la apatía, y tiene un efecto negativo sobre el bienestar animal (y por ende, sobre la producción de huevos).
Así que se antoja una mejor comprensión de esta conducta para el desarrollo de una solución más adecuada al problema. Aunque existen varias teorías, como que es un mecanismo para reducir la competencia por los recursos mediante la eliminación de los competidores, la hipótesis más convincente relaciona el comportamiento caníbal con una alimentación equivocada. Varios autores han hecho hincapié en la estrecha semejanza del picoteo caníbal de los tejidos de la misma especie para satisfacer una necesidad de proteínas adicionales en la dieta de las gallinas.
La raíz de canibalismo sería así una deficiencia de proteínas. La industria del huevo se ha convertido en cada vez más dependiente de fuentes de proteína vegetal, como la soja, como el principal componente de la dieta de las gallinas. Y se ha sugerido que la ausencia de proteínas de origen animal en la dieta puede estar relacionado causalmente con una mayor incidencia del canibalismo en gallinas ponedoras.
Por lo tanto, proporcionando una adecuada alimentación o algún dispositivo de enriquecimiento proteico se puede prevenir o reducir la incidencia de canibalismo en gallinas ponedoras. Porque al final, al igual que le pasaba a Hannibal Lecter, el canibalismo en las gallinas ponedoras no deja de ser una cuestión de nutrición.
Gallinas comiendo...un muslo de pollo.
Vía Mendeley, Applied Animal Behaviour Science y Back to the Basic Living
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