OPINION

Suspendido el festival Glastonbury 2012 por falta de retretes portátiles

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Glastonbury es uno de los mayores festivales de música de todo el mundo: cada año reúne en torno a 130.000 visitantes y en su cartel brillan los mejores grupos del momento. Pero por muy importante que sea, Glastonbury palidece ante el fulgor de los Juegos Olímpicos, concretamente los de Londres 2012, que coinciden en el tiempo y casi en el espacio con el festival de música. Según los organizadores del festival, Londres 2012 ha acaparado los retretes portátiles de todo el país y la policía del área, de modo que no tienen otra opción que cancelar esa edición del festival.

Glanstonbury ha sobrevivido a lluvias torrenciales, vientos huracanados y riadas de barro hasta la cintura de los asistentes, pero va a rendirse ante la escasez de urinarios. Micheal Eavis, organizador del festival, confirmó ayer a la prensa inglesa que Glastonbury no se celebrará: “Nos hemos dado cuenta a tiempo de que íbamos a tener un gran problema”, declaró a Daily Mail. “Tenemos nuestra propia reserva de baños portátiles pero siempre necesitamos más. Disponemos de cuatro proveedores de baños portátiles pero Londres siempre tiene una gran demanda, que además se va a multiplicar exponencialmente con los Juegos Olímpicos, de modo que los precios se van a disparar”.

Quién estuviera en Glastonbury en algunas ocasiones.

A la carestía de mingitorios hay que añadir la escasez prevista de agentes del orden. Cada edición de Glastonbury supone la movilización de al menos 600 policías, con un coste total de 1,2 millones de libras (1,5 millones de euros). Pero Londres 2012 requerirá de los servicios de 9.000 agentes diarios, muchos de ellos movilizados desde otras zonas del país y que acudirán a la capital antes de la inauguración de los Juegos, el 27 de julio. Glastonbury suele celebrarse a finales de junio.

Sea como fuere, Eavis, de 75 años, no se muestra compungido por la suspensión del festival: “Cada cinco o seis años solemos tomarnos un año sabático, así que esta es una buena ocasión para descansar. Hace varios años que no voy de vacaciones con la parienta, así que aprovecharemos para coger el Mini y acercarnos a Londres en el verano y ver las Olimpiadas”. Y mear en los deseados retretes portátiles, claro.

El plan B, finalmente descartado.

Visto en Telegraph y Daily Mail.

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