OPINION

Condenan a un ciudadano de Malawi por anunciar erróneamente el fin del mundo

Fin-del-mundo
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El Apocalipsis, prorrogado cinco meses.

Harold Camping, el predicador que anunció el fin del mundo para el pasado 21 de mayo (y que, visto lo visto, no tuvo lugar) no ha sido amonestado por las autoridades terrestres por su falsa profecía (sí por las celestes: ayer sufrió un ictus cerebral). Menos suerte ha tenido un discípulo suyo, que divulgó el supuesto fin del mundo en su país, Malawi, y ha sido considerado culpable de un delito “contra la paz y la seguridad de los ciudadanos” por un juez.

Saduk Mawambene, un humilde mecánico de bicicletas de 39 años, se creyó a pies juntillas las predicciones del predicador Camping. El hombre fue arrestado en la calle el pasado 21 de abril cuando repartía octavillas que anunciaban el Día del Juicio Final. Con muy buen criterio, el juez encargado del caso le dejó libre y le convocó de nuevo tras la fecha anunciada: el 21 de mayo, no fuera a ser que…

Pero fue que no: el mundo seguía girando el 22 de mayo y Camping posponía el Fin del Mundo unos meses, hasta el 21 de octubre próximos. Su lejano seguidor, Mawambebe, fue condenado a seis meses de prisión por el juez del distrito de Chitipa, en la frontera con Tanzania, aunque la sentencia está en suspenso, en tanto el hombre se declaró culpable y no tiene antecedentes penales.

El acusado ha reconocido su arrepentimiento por sus actos, que estuvieron influidos por “falsos profetas”, según declaró a la policía. Puede darse por contento, porque la ley malawinse no se anda con chiquitas: en el país africano es delito tirarse un pedo en público.

Varias ciudades de Malawi lucieron carteles anunciando el fin del mundo, que fueron discretamente retirados sin mayor explicación tras el 21 de mayo. En España también pudieron verse varios de estos carteles, firmados por FamilyRadio.com, el medio de difusión de los seguidores de Camping. Nadie ha sido juzgado tras el monumental timo.

El apocalipsis ha sido aplazado, de Shag.

Mientras llega el 21 de octubre y verificamos la precisión de la profecía, aquí van diez de los fines del mundo que nunca sucedieron:

1284. El papa Inocencio III concluyó que el fin del mundo tendría lugar ese año por ser la suma de 666 y el año de fundación del Islam. Resulta evidente la retorcida lógica aritmética del Santo Padre.

1524. Una conjunción de los planetas en el signo de Piscis condujo a que los astrólogos británicos vaticinaran un gran diluvio como preludio del fin del mundo. Cuando el día pasó y, para variar, no cayó una gota en las islas, se pospuso el Fin del Mundo para cien años después.

1881. Ésa fue la primera fecha para el fin del mundo anunciada por Charles T. Russell, fundador de los Testigos de Jehová, una secta muy dada al catastrofismo. Al marrar en su primer intento, Russell pospuso el Ocaso para 1914. Sus sucesores ampliaron el listado con la inclusión de 1925, 1966, 1975, 1984 y 1994, sin acertar hasta ahora, gracias a Jehová.

1910. El penúltimo paso del cometa Halley por la órbita terrestre también trajo consigo la consiguiente marea apocalíptica. En concreto, el astrónomo Camille Flammarion publicó “El fin del mundo” anunciando la desaparición de la vida en la Tierra y recibió crédito por parte del New York Times. No hay constancia de extinción alguna aunque sí de histerismo generalizado.

1990. La Iglesia Universal y Triunfante (ahí es nada) anunció que el 23 de abril de 1990 el mundo entraría en un período de “karma negativo” que acabaría con una guerra nuclear entre Estados Unidos y la Unión Soviética. Por fortuna, para entonces la URSS tenía tanto futuro como Gerardo Iglesias.

2000. Una cifra tan redonda y llena de ceros no podía quedar al margen de su correspondiente Apocalipsis. Desde Juan XXIII –que predijo en 1961 que el Día del Juicio Final comenzaría ese año con una bomba nuclear lanzada sobre Europa por un grupo terrorista libio (¿)- hasta los cenizos que auguraron un masivo fallo informático (Y2K) fueron legión los que anunciaron la debacle.

2003. A principios de mayo un centenar de japoneses vestidos como los secuestradores de ET acampaban en las afueras de Tokio. Se trataba de Pana Wave Laboratory, grupo fundado en 1977 y que había anunciado el fin del mundo para el pasado 15 de mayo, día de San Isidro, mediante la inversión magnética de los polos terrestres.

2016. Un grupo de estudiantes y su profesor encontraron en California una “cápsula de tiempo” (sic) en la que, como en los chistes, había dos predicciones, una buena y una mala: la buena es que los hombres dejarán de guerrear y resolverán los conflictos pacíficamente. La  mala es que una enfermedad acabará con la Humanidad en 2016.

2050. Un informe de la organización ecologista World Wildlife Fund (WWF) situaba hacia 2050 el agotamiento de los recursos naturales en la Tierra, haciendo inviable la vida para el ser humano y varios miles de especies más. El intencionado alarmismo de WWF trataba de alertar a la Humanidad sobre los peligros del consumo desaforado.

2060. Isaac Newton, probablemente el científico británico más notable de todos los tiempos (y alquimista en sus ratos libres), predijo que el Armagedón tendría lugar en 2060. Los más jóvenes podrán asistir a tan especial acontecimiento.

Y además:

Noticia original en France 24. Vía AOL.

Y además:

-La Gran Decepción

-Las profecías de Harold Camping

-Buenas noticias: el mundo no se acaba todavía

-¿Apocalipsis ahora? No tan deprisa

-“La gran catástrofe de 1983”

-La NASA desmiente que el mundo se vaya a acabar en 2012

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