OPINION

Vu&Baa: la lucha más allá del amor de un hombre por su oveja

oveja1
oveja1

Una oveja lanuda, un mecánico vietnamita y un bufete frío de abogados. Estos son los tres vértices de un triángulo de odio y pasión que ya se ha convertido en una batalla legal que puede costar 60.000 dólares australianos al que pierda el juego.

Vu Ho, de 54 años, ha llevado la lucha por "Baa", su “adorada amiga”, hasta la Corte Suprema australiana después de que el Ayuntamiento de Greater Dandenong, allí donde todo es grandioso, haya amenazado con quitarle a la mascota porque no está permitido tener ganado en el jardín de su casa.

Si pierde el caso el próximo 7 de septiembre, se enfrenta a 30.000 $ en las costas del juicio, más una cantidad idéntica para los abogados del ayuntamiento.

El mecánico afirma que Baa se ha convertido en “más que una hermana menor, una auténtica hija” para él y que haría lo que fuera necesario para mantenerla en su jardín.

Todo empezó como empiezan estas cosas: un mecánico vietnamita que decide que, igual es una buena idea, poner a una oveja a pastar en el jardín, para que le deje el césped recortado e igualado.

Pero lo que comenzó como un simple servicio profesional, se convirtió en una relación paternovina de unas dimensiones tan intensas que sólo se han visto más allá de Orion.

O de Venus, que es el monte donde Vu se imagina reconfortado cuando se tumba con la oveja. “Lo único que sé es que tengo que cuidar de ella y cuidar de su bienestar”. El Sr. Ho ha mantenido a Baa en su taller, transformado en establo, al lado del patio de su casa, cerca de 10 años.

Hasta que el pasado 25 de febrero recibió una multa de 220 $ por "mantener ganado en un espacio inferior a media hectárea". El Sr. Ho, quien se mudó a Australia en 1981 como refugiado vietnamita, apeló en 2005 la ley local del consejo, diciendo que por "ganado" se pueden referir a cualquier animal, incluyendo perros y gatos; así que antes de ver salir las lanas de Baa por la puerta, quería ver desaparecer todos lo perros y gatos del vecindario.

El Ayuntamiento ha actualizado las leyes a finales del mes pasado, de tal manera que exime a perros y gatos de la palabra "ganado", por lo que el Sr. Ho trasladó a Baa a una granja en Cranbourne hace tres meses, mientras preparaba su desafío, su batalla final a pecho descubierto.

Sin embargo, dijo que "sentía" que Baa está sufriendo por no estar junto a él. "Hace dos semanas, pude sentir que todo estaba perdido. Aunque también note una sensación de calor indescriptible, algo que sólo me lo puede dar la lucha por recuperar a mi oveja".

Qué tengas suerte en el juicio...Baa.

"¡A ésta no la llaméis a declarar que es muy mentirosa!"

Vía Perth Now

Mostrar comentarios