OPINION

Movilizan varios helicópteros y un telépata para capturar una vaca prófuga en Alemania

yvonnebig
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Su nombre es Yvonne. Es de color canela, aunque su cabeza es blanca. Tiene seis años y pesa 700 kilos. Es una vaca. Y muy astuta.

Yvonne se escapó en mayo de una pequeña granja en el estado alemán de Baviera, donde iba a ser sacrificada. Desde entonces, ha dado al traste con todos los intentos de la policía, sus dueños y grupos de defensores de los animales por encontrarla. Y eso que se han empleado desde rayos infrarrojos hasta un “susurrador de vacas”, sin suerte.

El caso se hizo popular en la prensa alemana cuando Yvonne fue atropellada por un coche de policía días después de su huida. Las autoridades germanas dieron entonces la orden de buscar y abatir al animal, al considerarlo un peligro para la circulación de los vehículos de la región. No hizo falta disparo alguno, ya que la vaca fugitiva buscó refugio en un bosque situado a 15 kilómetros de la granja de donde huyó para no volverse a dejar ver.

Ahora, desde todas partes del país, llegan voluntarios defensores de los animales para tratar de encontrarla y librarle de su fatídico destino. Luego están los dueños, deseosos de convertir en 700 kilos de filetes al pobre animal y claro, la policía, que algo tendrá que opinar en el asunto.

Lo máximo a lo que han llegado es a algún encuentro en la distancia antes de que la vaca fantasma se pierda entre los árboles sin dejar rastro. Y eso que medios no han faltado. La policía (que ha suspendido la orden de matar al animal dada la expectación creada) ha rastreado la zona con helicópteros dotados de cámaras  infrarrojas, sin éxito. También se ha empleado las habilidades de un “susurrador de vacas” (sic), que afirma estar comunicándose telepáticamente con el animal, que aunque entiende que ya no le quieren herir, está demasiado asustado para presentarse. Por último, también hay un experimentado rastreador tratando de dar con la pista del mamífero.

El futuro del intrépido bovino ya no pinta tan oscuro como hace tres meses. El periódico alemán de mayor difusión, Bild, ha prometido una recompensa de 10.000 euros a quien aporte algún dato fiable que permita su captura sana y salva. En la Red, Yvonne cuenta ya con un grupo de Facebook de más de 23.000 seguidores. Incluso un refugio para animales ha comprado la vida de la vaca para transportarle a un lugar tranquilo donde pueda vivir en libertad. Si alguna vez sale del bosque, claro. Yvonne tiene ya hasta un robusto semental esperándole en el linde del bosque, que los dueños del refugio esperan sirva para hacerle salir de una vez de su escondite. Desde luego, atractivos no le faltan, ya sólo queda que  se decida a aparecer.

Animales que ansían ser libres

No es la primera vez que oímos una historia semejante. En junio de este año moría Shrek, una oveja neozelandesa que en 2004 saltó a la fama tras huir para evitar ser trasquilada. Llevaba fugada seis años hasta que fue encontrada en una cueva. Por desgracia para Shrek, su tragedia se convirtió en un lucrativo espectáculo para sus dueños, que decidieron esquilarle en directo en un programa de televisión. Su historia no acabó ahí. Su fama le hizo ser protagonista de libros infantiles, conocer al primer ministro de neozelandés e incluso recaudar dinero para asociaciones benéficas, al más puro estrella del rock, pero sin drogas.

Fuentes: afp, sfgate, strambotic

Imágenes: afp, bildstrambotic

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