En Estados Unidos es habitual. Allí pasa todos los días. Da igual el canal: el público que va a un plató lo vive. Y mucho.
Los espectadores están activos, observan entusiasmados, dan juego, participan e incluso, a veces, parecen exaltados. Éstos cinco ingredientes son imprescindibles a la hora de transmitir ritmo hipnótico en televisión. Son la clave para dar la sensación de que un programa cualquiera es un evento excepcional. Todo un plus.
En cambio, en los últimos años, en nuestro país nos hemos acostumbrado al figurante dormido, soso, apalancado, prototípico… autómata.
Y lo peor es que estamos promoviendo ¿inconscientemente? este tipo de público en multitud de programas. Porque no da problemas, porque aguanta las grabaciones maratonianas, porque es parte del decorado.Imágenes: público en 'The Ellen DeGeneres Show' esta semana
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