OPINION

La televisión vista por Andreu Buenafuente, en siete puntos

BUENAFUENTE TELEVISION
BUENAFUENTE TELEVISION

Buenafuente y su equipo de El Terrat han diseccionado nuestra historia catódica en Lo que vendría a ser la televisión en España (Planeta). Un particular repaso a la tele que nos parió hecho por gente que hace tele. Con motivo de la presentación del libro, Andreu Buenafuente ha reflexionado con nosotros sobre su oficio: la televisión.

UNO. EL FLECHAZO CATÓDICO

"Me enamoré de la televisión cuando fui a ver en 1991 el programa de Àngel Casas Un día es un día (La 2). Esa noche tenía de invitados a José Luis Rodríguez El Puma y a Ana Obregón. Estuve en las tripas del estudio, detrás del decorado… me entró una gran fascinación por todo aquello, dije: tengo que trabajar en esto. Y, curiosamente, terminé haciendo tele en ese mismo polígono de Sant Just Desvern".

DOS. LA COMPLICIDAD CON TV3

"Reivindico la televisión calatana. TV3 es una cadena equilibrada, donde estás cómodo viendo todos los programas. Algunos te interesarán más, otros menos, pero demuestra que se puede hacer una tele que no es vergonzosa y que ama el oficio. A mí me toca de cerca porque estuve muchos años trabajando en ella y la conozco bien. TV3 es la más digna de todas las teles autonómicas, que ahora están en el ojo del huracán. Si se puede perdonar una deuda, esa es la de TV3 por el servicio que da. Aunque, evidentemente, sus cuentas tienen que estar al día y sanearse. Además, tiene una directiva, Mònica Tarribas, que da gusto hablar con ella. Sólo una mujer como ella podía autorizar una entrevista como la que hice a Punset en pleno prime time. Fue una locura entrañable. Y, por eso, tengo ese amor y preocupación por la tele donde nací televisivamente".

TRES. EN BÚSQUEDA DEL MOMENTO TELEVISIVO

"Me gusta compartir instantes televisivos con gente que tiene mucha química en pantalla. Al final, soy un buscador de momentos televisivos. Para mí eso es la tele: algo que comentas al día siguiente con la gente. Disfruto entrevistando a profesionales del medio pero, también, a personas de otros ámbitos. Economistas, psicólogos… en definitiva, descubrir. De repente estar con Gonzalo Abadía, un señor que estaba ahí en el plató como un marciano y, desde el primer momento, darte cuenta de que funciona en tele. Descubrir es el placer más grande".

CUATRO. LA CRISIS CON TALENTO

"Ahora se hacen programas con menos dinero, que duran hasta cuatro horas y que gastan menos en decorados y vídeos. Pero nosotros seguimos igual que siempre, intentando hacer programas con cuatro duros y que parezca que hay ocho. La televisión siempre fue cara, igual demasiado cara, porque entrabas en un plató y estaba lleno de gente trabajando por todos los lados. Pero el buen guión y el buen talento no tiene por qué ser caro".

CINCO. EL VACÍO DE LA TDT

"La TDT está por hacer. Me esperaba más de ella, pensaba que iba a existir más industria. Pero no se ha desarrollado. Y eso es una irregularidad. Están las grandes cabeceras que luchan con grandes presupuestos y están las pequeñas con el talento emergente. Los próximos años se tiene que valorar todavía más ese canal reducido que tiene mucho que aportar. Soy un defensor de la cadena pequeña y no se me caen los anillos por estar ahí. En la radio empecé en una emisora en Barcelona que no tenía oyentes, ninguno. En el primer estudio de audiencia de mi programa salió cero y cero. Cero oyentes en la primera hora y cero en la segunda. Ahí me curtí. Porque un canal pequeño no es un canal menor. También me gustaría que en España la televisión de pago fuera más estable y se invirtiera como se hace en otros países".

SEIS. DEJAR DE TRASNOCHAR

"Mi próximo programa será la última versión de mi mismo. Porque al final siempre hago lo mismo, salir y contar mi visión del mundo. Lo hago acompañado de gente y comedia. Parece fácil, aunque es un poco complicado. Ahora, ofrezco a las cadenas un programa que quiero en prime time. Ese es uno de los motivos de haber parado el otro, pues después de siete años ya habíamos dado todo en late night. Y teníamos esa anomalía de la gente que te dice “es que no te puedo ver”. Entonces, llega un momento que eso te cansa y te invita a buscar un nuevo público. Así que regresaremos en horario de máxima audiencia con un espacio de entretenimiento con personajes famosos y no famosos, para reírnos de la vida con música de fondo".

SIETE. EL COQUETEO CON TELECINCO

"Con Vasile tuvimos un encuentro como productora porque hacíamos Las noticias de las 2 en Cuatro y quiso saber qué estábamos preparando y le comentamos que estábamos en un limbo industrial. Hoy ya no es como hace quince años, cuando venía alguien que te ponía un talón y eras suyo para siempre. Aquí, ahora, hay que discutir mucho y ajustar muchas cosas. Estamos hablando con todos, aunque tampoco hay tantos, y trabajando en un programa sin cadena. Antes del verano sería lo suyo volver".

Mostrar comentarios