En esta mesa, vimos a Tony Soprano por última vez. Es el restaurante Holsten de Bloomfiel, en Nueva Jersey. Ahí se rodó la secuencia final de la mítica ficción de HBO. Ahí, esta semana, hay un cartel de “reservado”.
De esta simbólica forma, los propietarios del establecimiento que inmortalizó la serie, hace ya seis años, rinden homenaje a James Gandolfini, fallecido el pasado miércoles víctima de un infarto.
Un tributo realizado justo en el mismo lugar donde el actor comía aros de cebolla segundos antes de que Los Soprano se fueran a negro para siempre:
http://www.youtube.com/watch?v=rnT7nYbCSvM
La instantánea de la mesa (arriba) ha sido tomada por Almudena Ariza, corresponsal de TVE en Nueva York. De hecho, cientos de fans de la ficción están acudiendo el lugar como si fuera un templo sagrado. Los dueños del restaurante han sido rápidos de reflejos a la hora de rendir homenaje… y mitificar su propio negocio. Son los Estados Unidos de América, donde el sentido del espectáculo está incluso por encima de la muerte. Descanse en paz.
MÁS SOBRE GANDOLFINI
> Muere James Gandolfini, inolvidable protagonista de ‘Los Soprano’
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios