OPINION

'A Bailar' llega con éxito frente a 'El Príncipe': errores y aciertos del estreno de Antena 3

A BAILAR MONICA NARANJO
A BAILAR MONICA NARANJO

El Príncipe arrasó anoche con 26.3 por ciento de share y 5.204.000 espectadores. Sin embargo, el éxito de la serie de Telecinco no ha frenado el buen estreno de A Bailar. Una vuelta de tuerca al género de los programas bailongos, que llegó atrayendo a un 18.8 por ciento de share y 3.271.000  seguidores. Analizamos cuatro aciertos y cuatro errores de este nuevo formato. ¿Aguantará su audiencia tras la expectación inicial?

ERROR 1. I GOTTA FEELING

A bailar arrancó con I Gotta Feeling. ¿Toda una declaración de intenciones? Un manoseado hit de 2009 para abrir un espectáculo en 2014. Este detalle ya marcaba lo que sería después la esencia de la primera gala:  parecía un programa de aquella Antena 3 de antes de Tu cara me suena Me resbala. Los tópicos de otra década abundaron en una escaleta sin tensión, que desprendió previsibilidad y que, además, parecía imitar al show de imitadores de los jueves. Pero, claro, esto no es el show de imitadores de los jueves.

ERROR 2. LA REALIZACIÓN

En el primer programa de A bailar dio la sensación de que se querían esconder las torpes dotes para el baile de las famosas parejas participantes. El plano lejano mandaba en una desordenada realización que nos dejó muy fríos. Tampoco ayudó el montaje, tosco, que resquebrajaba la narrativa del show. Al final, A bailar volvió a caer en la trampa de confundir ritmo televisivo con la velocidad atropellada que rompe cualquier clímax. Y el clímax es fundamental en un estreno para empatizar con los concursantes, generar nervios e impulsar la emoción.

ERROR 3. HILO MUSICAL

Los fondos musicales que arropaban las presentaciones del programa parecían compuestos para un espacio de testimonios de los años noventa. Para El Diario de Patricia o Sinceramente, Ana Rosa estaban bien. Sin embargo, esto es un talent show.

ERROR 4. ANTICOLOFÓN

Tras proclamar el ganador, A bailar pretendió estirar su duración con un ortopédico pegote donde se especulaba con las canciones de la semana siguiente. Unos minutos eternos en los que el show se olvidó del secreto para el éxito de cualquier concurso de prime time: infectar en el espectador ese intenso furor apoteósico de los instantes finales. En cambio, A bailar cerró su primer día sin 'chimpún' y dejó que la última imagen de la noche fuera de un plano cualquiera, al azar. Mal. Un show televisivo debe bajar el telón con un primer plano de reacción expresivo o un gran plano general que contagie esa espectacularidad que te deja con ganas de más. Pero anoche no hubo ni lo uno ni lo otro. Tampoco ayudó el público en plató, que evidenciaba ser figurantes que se levantaban y sentaban como si fueran autómatas.

ACIERTO 1, NARANJO SUPERTVSTAR

La maestra de ceremonias, Mónica Naranjo, fue la gran revelación de la noche. Es más, aprobó con nota en su estreno como presentadora. La cantante demostró que tiene el instinto necesario para comandar con fuerza e intuición cualquier tipo de programa. Incluso el Telediario. Ahora sólo falta que coja más rodaje en A bailar y se atreva a tomar los mandos del prime time con su carismática (y traviesa) espontaneidad habitual, que no tiene miedo a jugar, sin corazas, con esa ilusión de los engranajes televisivos que descoloca (para bien) cualquier escaleta.

ACIERTO 2. ¡VIVA EL LED!

A bailar tiene presupuesto. Lo demuestra el decorado que ha sabido huir de la prototípica pista de baile que describe al espacio original Mira quién baila. La iluminación también ha sido un acierto, exprimiendo, con dispendio de color, los diferentes ambientes del plató donde se graba el programa que, por cierto, es el mismo en el que se realizó la primera etapa de La Voz o Los Misterios de Laura.

ACIERTO 3. CONCURSANTES POR LA LABOR

Óscar Martínez, Soraya, El Monaguillo, Pastora Vega... los concursantes del espacio tienen las tablas suficientes para dar grandes momentos al espacio. Con la evolución lógica del formato irán creciendo sus filias y fobias, su comedia y su drama. Por suerte, en su mayoría, ya vienen de casa con la experiencia suficiente para la improvisación en plató. Quizá, eso sí, falta un mayor equilibrio de perfiles en el casting. Pero es una buena baza la participación de, por ejemplo, un futbolista como Cañizares (¡un futbolista!) o contar con la visión televisiva de Óscar Martínez.

ACIERTO 4. QUÉ FLUYA

Antena 3 sigue siendo coherente en un tipo de entretenimiento familiar y ha apostado por lanzar este programa en los martes, pues es una oferta complementaria al gran éxito de Telecinco y, así, arañan un público alternativo que no sigue ficción. Ahora, A bailar debe rodar y rodar en busca de la personalidad propia. Esa personalidad propia que confía, avanza, arriesga y crece en la física y química de uno mismo, sin intentar imitar a otros. O, tras la expectación inicial, irá desinflando su buen arranque.

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