OPINION

'Cocineros al volante' convence: así triunfa TVE con su particular 'MasterChef' sobre ruedas

paula prendes cocineros al volante
paula prendes cocineros al volante

La televisión que da hambre sigue su cauce de notoriedad. La 1 ha dado en la diana con Cocineros al Volante (13.3 por ciento de share y 1.967.000 espectadores), la competición de siete food trucks, que se lanzan a las carreteras españolas para sorprender con su particular visión de la gastronomía. Un formato que sirve para estirar la exitosa esencia de MasterChef. Incluso, para ello, ha fichado a Carlos Maldonado, ganador de la reciente tercera edición del talent, que a este ritmo se va a convertir en la estrella más famosa de la actual TVE.

Y es que estrella tiene el chico: telegénico, campechano y "genio de la cocina", como fue definido por Ferran Adriá. Ahora, como si fuera en una spin off, seguimos viendo su arte entre fogones en este tipo de caravanas customizadas, que el programa llama 'cocinetas'. ¿Volverá a ganar Carlos Maldonado en su nueva aventura, ahora jugando con su padre? Difícil de pronosticar, lo que está claro es que con este formato sí hay un claro ganador: TVE.

Porque Cocineros al volante es un programa de su tiempo, que mantiene valores de MasterChef, pero que además incorpora su faceta de road movie: mostrándonos el territorio nacional, sus gentes, sus costumbres, sus parajes y la reinvención de determinados platos de su rica gastronomía gracias a la creatividad de unos participantes muy particulares. Algunos manitas de la cocina, otros directamente manazas con los que el espectador puede aprender y hasta desaprender (atención a las amigas pin up, que prometen grandes momentos).

Pero Cocineros al volante no es sólo un concurso, es un espectáculo de la divulgación. Entra por los ojos, cuidando el contenido y el continente (elegantes grafismos, atractivas escenografías de las 'cocinetas', poderosos planos aéreos de cada localización...). Y, además, el programa cumple la principal máxima de la televisión. Es entretenido.

Un digno heredero de MasterChef que, esta vez, cuenta con Paula Prendes, como presentadora, junto a un jurado compuesto por dos chefs con sobredosis de buenrollismo, Íñigo Pérez ‘Urrechu’ y Álex Alcántara. Este último ha sido promocionado desde dentro, pues estaba detrás de cámaras en el propio MasterChef, como responsable culinario del programa, e incluso era uno de los encargados de catar los platos (y dictar sentencia) antes de que Pepe Rodriguez, Jordi Cruz y Samantha Vallejo Nágera hincaran el diente.

Alcántara sobrevivió a tanta degustación en maratonianas jornadas de grabación. Como la televisión pública está sobreviviendo al empacho de tanto vaivén en su programación. Pero esta comitiva de caravanas es esperanzadora porque, de momento, lleva a TVE a la mejor de sus metas: encontrarse con la gente, la gente de la calle.

@borjateran

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