Cristina Lasvignes ha regresado a la televisión dando de amamantar a su hijo en directo. Así ha comenzado el nuevo programa de las tardes de La 1, Esto es vida. Un show que llega para divulgar la salud y comentar el también nuevo espacio que lo precede, Centro Médico, donde se recrean diferentes sucesos hospitalarios.
Los dos formatos lo tienen difícil para darse a conocer, pues las tardes de La 1 no pasan por buen momento de audiencias. Así que los responsables del programa han sabido llamar la atención, provocando que los medios de comunicación se hagan eco del hecho de que la presentadora dio de mamar a su hijo en la grada del plató.
"Sí, lo sé no es muy habitual, ¿verdad? empezar un programa dando el pecho a tu hijo. Pero es que en Esto es vida van a pasar cosas muy poco habituales. Por ejemplo, hoy vamos a hablar de ellos, de lactancia y vamos a hacerlo de una manera muy natural. Y, ¿qué hay más natural en el mundo que dar el pecho a tu hijo? ¿verdad que sí?", dijo Lasvignes. Un arranque bonito con una presentadora que se echaba en falta en nuestra televisión.
Y de lactancia hablaron y de los tabúes que conlleva, pues aún es necesario normalizar la lactancia en público. Empezando por la propia televisión. También, en la misma emisión de estreno, trataron el cáncer de mama e incluso se divulgó cómo se debe palpar el pecho con la participación de dos modelos, un hombre y una mujer. Los dos desnudos de cintura para arriba. Sin miedo a la desnudez mostrada de forma natural y sin énfasis en ella. Incluso en horario de protección infantil.
El problema de Esto es vida está en su fórmula televisiva, que se inspira en el formato estadounidense de The Doctors. Es la espectacularización de la salud con un elenco de doctores que parecen show-men y muchos toques de humor. Aprovechan hologramas y hasta existe una sección con una especie de experimentos para explicar mejor cómo funciona nuestro cuerpo. Todo con mucho ritmo y desde un plató muy luminoso.
En sus primeras ediciones, el programa, además, evidencia demasiado sus cortes de edición. Está grabado y muy montado, a veces confundiendo ritmo con velocidad. Sus espectadores potenciales con tanta prisa se pueden perder. No se da tiempo a digerir la información. Y es que Esto es vida es una especie de El Hormiguero sobre la salud. Pero para explicar la salud de forma entretenida tampoco hace falta irse a la narrativa del show más vertiginoso de variedades, donde se puede confundir divulgación con vulgarización. Por suerte, Cristina Lasvignes aporta sensatez a todo lo que toca.
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