OPINION

Jorge Javier Vázquez: su as en la manga en Supervivientes (que no tuvo en Gran Hermano)

jorge javier supervivientes
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"No deberías perder la oportunidad de ser amiga de la persona que ha compuesto La Salchipapa", soltó Jorge Javier Vázquez a una Alba Carrillo enfadada con Leticia Sabater. Es una de las muchas y divertidas perlas que pronunció anoche Vázquez durante la gala de Supervivientes. En esta edición del reality, el presentador está demostrando, de nuevo, que es el maestro de ceremonias perfecto, que el formato le viene como un guante y que controla con mano maestra cada minuto del programa.

Jorge Javier impulsa el interés del show porque, como los grandes y escasos comunicadores, araña la complicidad del espectador con la travesura que merece un concurso de estas características, donde la aventura se entremezcla con personajes nacionales dignos de cómic. Jorge Javier conoce bien las filias y las fobias de cada uno de estos personajes y las exprime constantemente para alcanzar un buen gag, para jugar con la comedia del vivo y el directo. Jorge Javier vacila a unos y a otros, les pica, les tensa, les emociona y también les hace reír cuando necesita distender la situación ("Leticia, ya sé que estás muy afectada porque este sábado es Eurovisión y no podrás verlo", le dijo a Sabater en un instante en el que ella estaba arremetiendo contra Bigote Arrocet).

Al final, en Supervivientes está omnipresente la máxima del éxito televisivo: el conductor del formato contagia a los espectadores su propio disfrute del show. Jorge Javier se lo pasa genial presentando Supervivientes y esto se nota. Está cómodo, siempre con la sartén por el mango, y se deja llevar por su característica ironía. Y, como consecuencia, los momentazos se suceden. Tanto que la comparación con su reciente paso Gran Hermano resulta inevitable. En GH, al presentador nunca se le vio igual de cómodo. Allí parecía que el formato le imponía demasiado y le absorbía su brillantez habitual. Las críticas fueron abundantes y el descontento de los más fieles seguidores también hizo mucho ruido, acostumbrados a Mercedes Milá. No obstante, el insípido casting de concursantes anónimos de la última edición de Gran Hermano tampoco ayudó a Jorge Javier.

Todo lo contrario de lo que sucede con Supervivientes 2017, donde Jorge Javier no necesita seguir un canal 24 horas que recoja la convivencia de un casa en Guadalix. Aquí cuenta con el as en la manga: ya conoce a gran parte de los concursantes, curtidos en platós de Telecinco. Jorge Javier se los toma en serio cuando toca, sin miedo a saltarse el guión si el show lo necesita y sin complejos para reírse de sí mismo. En definitiva, siempre dejándose llevar por su instinto del espectáculo. Ese instinto que le convierte en uno de los mejores y más infalibles presentadores del panorama actual. Al menos hasta que llegue Gran Hermano 18...

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@borjateran

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