OPINION

'Ella es tu padre': lo mejor y lo peor de la Señora Doubtfire española

Tras el éxito de ficciones como Aída y como complemento a los rompe-audiencias habitantes de La que se avecina, Telecinco necesitaba una nueva telecomedia en su programación. Y Ella es tu padre ha sido la propuesta elegida. Una producción que bebe de la clásica premisa de hacer reír con los equívocos que produce un hombre que se transforma en mujer para alcanzar un entrañable objetivo. En definitiva, una Señora Doubtfire a la española.

Los primeros compases de la ficción hacen presagiar lo peor. Una mala copia de la película de Robin Williams. Pésimas interpretaciones, guion sin gancho y una iluminación de programa infantil de los noventa. La historia pinta mal. Muy mal.

Hasta que se terminan los prolegómenos, esos previos que explican los problemas familiares que llevan al alejamiento de un padre de sus hijos por sus constantes meteduras de pata. Entonces, comienza la transformación del papá en la veterana profesora de música de sus retoños, Avelina. Entonces, la trama coge cierta gracia con buenos golpes de comedia.

Carlos Santos, encarnando a Sergio y su alter ego Avelina, vuelve a demostrar su talento como actor todoterreno. Con su interpretación hace más grande a este particular personaje que quiere ser atrayente para la audiencia de Telecinco en una noche que, además, el público ya está habituado a la ficción cómica con La que se avecina en el mismo canal y con Allí abajo en Antena 3.

Los lunes son un buen día para la comedia. En esta franja, puede rascar fieles Ella es tu padre, que intenta nutrirse de diferentes tramas paralelas para engatusar a todos y cada uno de los miembros de la familia y que, de paso, complementan la historia principal. En ese variopinto elenco, también está Belén Cuesta que da vida a la representante del grupo de rock de Sergio cuando no es Avelina.

Carlos Santos y Belén Cuesta destacan en el reparto, poniéndoselo difícil a otros actores del elenco que dan vida a un guion que ha metido a la coctelera viejos elementos del teatrillo tradicional que funcionaban antaño en prime time. Sí, también desnudos (con Rubén Cortada sin camiseta). Porque la televisión entra por los ojos. En Telecinco lo saben, lo aprovechan y ahora intentan volver al surralismo de la sitcom de humor infantil que evade a cualquier edad como también sucede con La que se avecina.

El problema está en que Ella es tu padre no tiene el tono de tebeo de los vecinos del Mirador de Montepinar, requiere más corrosión y, sobre todo, está escasa de personajes que caigan emocionalmente bien al espectador. Y una serie pincha sin protagonistas realmente empáticos con un público que necesita identificarse con sus motivaciones. Pero, claro, tal vez Ella es mi padre no es una serie, es simplemente un gag con una premisa ya vista.

@borjateran

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