OPINION

Conozcan a otro español olvidado que fundó la industria más potente del país

benigno de la vega inclán
benigno de la vega inclán

Este año se conmemora con gran pompa el cuarto centenario de la muerte de El Greco. Y este año, el turismo está batiendo récords de visitas: España es la tercera potencia turística mundial.

¿Qué cosas en común tienen estos dos hechos?

Se llama Benigno de la Vega-Inclán. ¿Les suena? No, claro. Es que es otro español olvidado. Pero ninguna de las cosas cosas anteriores se habrían logrado con tanta potencia si no fuera por este señor que murió hace unos 70 años.

Nacido en Valladolid en 1848, De la Vega-Inclán fue un amante del arte que fundó el museo de El Greco en Toledo, museo que se ha convertido en uno de los sitios más visitados hoy. Él compró las casas en la judería y las convirtió en casa museo de El Greco.

También fundó el Museo Romántico de Madrid, la Casa de Cervantes en Valladolid, y promovió exposiciones para mostrar la maestría de Rusiñol, de Sorolla y Zuloaga. Fue amigo de Turner, el pintor paisajista ingles.

Además, fue el promotor de los Paradores Nacionales en 1928. Su idea consistía en aprovechar el turismo cultural de los viajeros europeos, y ofrecerles una España llena de riquezas antiguas. Además, se evitaba el deterioro de muchos edificios históricos, que podían servir como estancias de itinerarios culturales. El primero fue el de Gredos (ver foto).

Fue con Don Benigno, quien además se encargó del stand de España en las Exposiciones Universales, asociando por primera vez el sol y el descanso al placer de visitar España. En la Exposición de Londres, se lanzó el lema Sunny Spain, la España soleada que hoy da tantos beneficios a la mayor industria española.

Daba a conocer no solo los sitios culturales, sino las artesanías, los trajes regionales y las costumbres del país. Y así proyectó la imagen de España creando museos turísticos, exposiciones y encuentros para fomentar la naciente industria.

En su faceta social, fue el promotor de las Casas Baratas de Sevilla para albergar a las familias obreras. Además, se dio cuenta de que las Exposiciones servían para acometer profundas reformas urbanas, cosa que los españoles aprendieron con la Exposición de Sevilla de 1992 o hasta los Juegos Olímpicos de Barcelona el mismo año.

Esta es solo una somera descripción. Hizo muchas más cosas, las cuales se detallan en la página web del Museo Romántico de Madrid (pinchar aquí). ¿Les importaría no olvidarlo?

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