Una buena parte de Cataluña está ahora pensando: si los escoceses han podido votar por la independencia o la unión, ¿por qué no nos dejan votar a nosotros?
Y en el resto de España, muchos deben estar pensando: "Oye, ¿y si dejamos votar a los catalanes? A lo mejor dicen NO, como los escoceses, y nos quitamos ese problema por mucho tiempo.
Es una idea tentadora.
Sí, pero... Y después, ¿quién? ¿Los flamencos de Bélgica? ¿Los bávaros? ¿Los corsos? ¿La Padania?
Supondría un test de estrés para Europa cada seis meses. ¿Lo resistiríamos?
Los catalanes y el resto de los españoles se están preguntando qué habría pasado si Escocia hubiera votado SÍ por la independencia. ¿Tormenta o nueva primavera?
La verdad es que no lo podemos saber.
A mí me hubiera gustado que lo de Escocia hubiera empezado con una 'demo'. Les damos seis meses de independencia y vemos qué tal sienta. Su moneda, su banco central, su pasaporte, controles en las fronteras, aranceles a los whiskys, fuera de la UE y de la OTAN... Con ello, los independentistas de toda Europa habrían visto las consecuencias.
¿Qué habría pasado?
Tarde o temprano habrían reproducido los mismos problemas que en el resto de Europa. Ser independiente no te libra de las crisis financieras, el precio del petróleo, la amenaza china, ni de la corrupción política.
Y tampoco de un rescate económico.
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