OPINION

Iñigo, ¡bienvenido a 'la casta'!

errejon
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Ver el partido desde las gradas y gritarle al entrenador: "¡No te enteras!, '¡Estás perdío!, ¡Esa portería tiene más agujeros que un queso gruyere!'... Eso es muy divertido. Te vas a casa descansao.

Al entrenador no le queda más remedio que responder a los gritones: '¡Baja tú aquí, listo, a ver si lo haces mejor!'. Claro. Sabe que una cosa es  insultar al equipo desde las gradas, y otra es saltar al campo y pelear.

Pablo Iglesias, Iñigo Errejón, Juan Carlos Monedero y los demás representantes de Podemos han estado haciendo eso desde las gradas: han insultado a los políticos de la Transición llamándoles 'la casta', 'corruptos', 'ineptos', y todo eso. Y todo el país les jaleaba porque estaban hartos también de tanta corrupción. Había tantos casos...

Pero los políticos de la Transición que se consideraban limpios estaban esperando su oportunidad para desquitarse. Y llegó.

Iñigo Errejón, el director de campaña de Pablo Iglesias y número 2 del partido, ha sido suspendido de empleo y sueldo de forma provisional por la Universidad de Málaga mientras se realiza una investigación.  Se le ha abierto un expediente informativo porque se le concedió una beca de 1.820 euros mensuales para realizar un trabajo y parece que no ha cumplido las condiciones.

También se le ha abierto un expediente disciplinario a Alberto Montero, dirigente de Podemos y persona de la Universidad de Málaga que le otorgó la beca.

Seamos honestos: no hay nada definitivo hasta que se pruebe. Pero...

En España basta poner a alguien bajo sospecha para condenarle sin remisión. La gente no dice, "seguro que es inocente"; 'ese político es inmaculado'.

No, señor. Cuando sales en la tele y en las portadas, la gente saca su conclusión: "Esto huele mal', 'Sospechoso', 'Seguro que ha metido mano en la caja...'. Especialmente si eres político.

¡Bienvenido a la casta, Íñigo!

Porque ser de la casta muchas veces es  que te pongan a parir antes de que el juez levante su dedo. Ser de la casta significa que por ser político, ya eres un corrupto.

Pablo Iglesias ha estado jugando con ventaja hasta ahora porque, en teoría, no tenía un pasado que le pudiese incriminar. Pero algún día tienes un tropezón. Quizá es algo sin importancia. Entonces descubres que España no es benévola, sobre todo en medio de la peor crisis financiera de las últimas décadas. España te crucifica.

Los políticos tan criticados de 'la casta' están felices porque ahora Podemos se lleva su propia medicina.

Ya saben: en política se cumple la tercera ley de Newton: toda acción conlleva una reacción en sentido contrario con igual fuerza. Si criticas a un partido, algún día ese partido aprovechará la ocasión para triturarte en la misma medida.

Es una de las leyes de 'la casta'.

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