La agencia Bloomberg acaba de anunciar que Warren Buffett ha sustituido a Carlos Slim como el segundo hombre más rico del mundo. Buffett tiene 60.000 millones de dólares, es decir, 48.700 millones de euros.
No es que los tenga en una caja de bombones en el salón de su casa. Es lo que valen las acciones de las compañías que ha comprado a lo largo de su vida.
¿Cómo forjó su fortuna y cuál es la filosofía de este norteamericano que ya tiene 84 años?
-Revelación. Cuando tenía 10 años fue con su padre a visitar la bolsa de Wall Street. A la hora de comer se sentaron con un holandés llamado At Mol. Tras el postre, llegó un cigarrero con un carrito donde había hojas de tabaco. El holandés escogió una, y el cigarrero le hizo un cigarro a mano. Entonces, Warren pensó: a pesar de la crisis, hay gente que gana dinero. Quiero tener dinero para no depender jamás de un jefe. Así lo cuenta en la biografía La bola de nieve: Warren Buffett y el negocio de la vida, de Alice Schroeder. Fue su gran revelación.
-Aprendizaje. De pequeño trabajó en la tienda de alimentos de su abuelo. Con su espíritu emprendedor, se puso a vender puerta a puerta, desde pelotas de golf, a coca colas, y goma de mascar. Con 15 años, compró una máquina de pinball y la instaló en una cafetería. Al poco tiempo, ya tenía varias máquinas distribuidas por la ciudad de Omaha. Estudió en la escuela Wharton de la Universidad de Penssylvania, fue rechazado por Harvard, y acabó sus estudios de finanzas en Columbia.
-Maestro. En 1954 empezó a trabajar como analista para Benjamin Graham, a quien considera su maestro en las finanzas. Allí depuró su técnica de invertir. Antes de comprar acciones, la mayor parte de los analistas se fijaba si la empresa era cara o barata consultando los balances y cuentas de resultados, pero Buffett además se fijaba en el equipo gestor. Esa costumbre le siguió por el resto de su vida. Acertaba más que nadie.
-La misma casa. En 1957 se compró en Omaha, su lugar de nacimiento, una casa de cinco habitaciones por valor de 31.000 dólares (hoy vendrían a ser 250.000 euros). Sigue viviendo en la misma casa. Tiene tres hijos. Su primera esposa falleció en 2004. Se casó nuevamente en 2006.
-Herencia donada. Buffett ha legado la mayor parte de su fortuna a la Fundación Bill y Melinda Gates. Dice que si sus hijos heredasen todo ese dinero se harían unos vagos. Siempre les aleccionó para que se buscaran la vida por su cuenta.
-El mejor libro de negocios. El libro de negocios que Buffett sigue recomendando (y que compró Bill Gates) es nada menos que de los años sesenta. Se titula Business adventures (aventuras empresariales) y lo escribió John Brooks. Es una recopilación de artículos publicados en The New York Times que tratan de por qué algunas compañías triunfan y otras fracasan indagando en sus causas más profundas (se puede conseguir en amazon).
-Carta a los accionistas. Buffett tomó clases de oratoria cuando era joven usando el método Carnegie para hablar en público. Es conocido por su franqueza y por su sencillez. Estas cualidades retóricas las expone cada año, en su carta al accionista. La suele exhibir en febrero en la web de su empresa inversora Berkshire Hathaway. Allí explica qué ha hecho, dónde invierte y por qué. Se lee en todo el mundo con una mezcla de diversión y ganas de aprender.
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