OPINION

Si los niños españoles quieren ser futbolistas, ¿qué modelo hemos creado?

ronaldo
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La encuesta de Adecco ha dado la vuelta a país: los niños españoles quieren ser futbolistas.  Y cuando se les preguntaba qué jefe escogerían, respondían que Cristiano Ronaldo o Messi. Más aún, cuando les preguntaban qué empresa les gustaría montar, respondían que alguna relacionada con el deporte.

¡Fabuloso! Ese es nuestro modelo del futuro: un país lleno de futbolistas y de empresas futbolísticas. ¿Nuevas tecnologías? ¿Ingeniero? ¿Arquitecto? ¿Filósofo? ¿Trabajador social?

No: fútbol, fútbol y fútbol.

Encima, esos futbolistas aparecen anunciando webs para jugar al póker. Grandioso. Os sea, que los maestros se pasan la vida poniendo como ejemplo a grandes figuras de la historia para que al final el niño tenga como modelo a un jugador de fútbol que le incita a jugar al póker por internet.

Me acuerdo cuando decían que en los años sesenta y setenta, España estaba anestesiada por el fútbol, arma de la dictadura para someter las voluntades. No lo sé porque no soy un apasionado del fútbol. Pero si aquello fue verdad, entonces a lo de hoy, ¿cómo lo llamamos? ¿Lavado de cerebro a escala nacional? ¿Control neuronal mediante la televisión? ¿Sometimiento de voluntades de forma subliminal? ¿Las Vegas?

Los niños no lo saben porque son demasiado ingenuos, pero desde pequeños ya forman parte de la maquinaria: visten camisetas de fútbol por las que están pagando mucho más de lo que vale producirlas, inmensamente más. Les convertimos en adictos a las marcas.

También les convertimos en adictos a equipos y en defensores irracionales de ese equipo, pase lo que pase: si le toca el Barça, defenderá los colores del Barça como si fuera la defensa del honor de la familia. Si le toca el Madrid o el Atleti, lo mismo. E insultarán y escupirán a los enemigos, porque son eso, enemigos.

De ahí, a formar parte de un partido político y defenderlo irracionalmente hasta en las situaciones más ridículas (como en el fútbol), hay un paso.

Por fortuna, las niñas salvarán este país porque en la encuesta de Adecco, sale que la mayor parte de ellas quiere ser maestra. ¡Bravo! Lo más importante de un país es su educación. "Todo pueblo que alcanza cierto grado de desarrollo se halla naturalmente inclinado a practicar la educación", decía Werner Jaeger.

Por si lo lo sabían, la cultura griega de la que heredamos los conceptos de civilización, democracia y cultura, estaba basada en la paideia, en la formación de los niños y las niñas griegos. En la educación.

Los griegos también crearon la cultura del deporte, los Juegos Olímpicos. ¿Saben en qué se basaba el invento? En unir a todos los griegos, incluso en medio de las guerras, y atraerlos a un panhelenismo poderoso.

Vamos, igual que cuando uno va a la final de la Copa del Rey.

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