OPINION

La renta básica que propone Podemos, ¿estimula o debilita a quien la recibe?

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El documento del plan económico de Podemos está disponble para sus simpatizantes desde el sábado pasado. Una de las propuestas más atractivas es la Renta Básica: toda persona que viva en España tendrá derecho a cobrar del estado 600 euros al mes.

Supongo que está basado en el documento de debate del círculo Podemos Renta Básica, según el cual se trata de un ingreso "pagado por el Estado a todos los ciudadanos que residan en el territorio del estado, sean estos nacionales, nacionalizados o residentes legales".

Si se pusiera en marcha esta medida en un hipotético gobierno formado por Podemos, sería un verdadero ensayo de ingeniería económica.

¿Y esa renta ayuda o debilita?

Ayudará mucho a aquellos que no tienen con qué sobrevivir  y están en paro. Para ellos, ya existía una cosa llamada salario social o renta mínima de inserción en muchas comunidades autónomas. Pero son casos especiales de marginalidad. Además se les exige que demuestran que no encuentran empleo y la cantidad que les dan es más pequeña.

La diferencia es que la propuesta de Podemos incluye a todos, estén o no al margen de la riqueza. Y aquí es donde empiezan las dudas. Si una persona gana 700 euros trabajando, podría preferir no trabajar y cobrar cada mes 600 euros.

Si una persona gana 600 euros sin trabajar, a lo mejor no le interesa moverse por un trabajo de 700 u 800 euros. Si esa renta básica incluye a una pareja, ya tienen 1.200 euros de entrada mensual, es decir, la media de este país. ¿Les interesará trabajar?

Hasta el líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha dicho que la propuesta de Podemos incentiva a quedarse en casa.

Las ayudas a las personas con problemas económicos tienen siempre un doble filo. Les permiten afrontar los gastos necesarios para sobrevivir, pero si se enganchan, pueden quedarse así para siempre.

Hace poco estuve hablando con una persona muy cercana a grupos de exclusión social que recibían la renta mínima de inserción de la comunidad de Madrid. Me dijo que muchas de esas personas apenas se mueven para encontrar un trabajo. Están paralizados y tan contentos. Y que había familias enteras 'enganchadas' a esta renta como si fuera una droga.

Y hay otro problema: si esa cantidad se ofrece a todos los nacionales y extranjeros, funcionará como un poderoso 'efecto llamada'. Una persona, por el hecho de desembarcar como refugiado, o entrar ilegalmente, podría tener derecho a cobrar 600 euros, una fortuna para esas personas que vienen de países muy pobres. Llamarán a amigos y familiares para que vengan a este país que les acoge con los brazos abiertos y las carteras llenas.

No dudo que una renta básica sea una ayuda para muchas personas y familias, para estudiantes sin recursos o ciudadanos expulsados del sistema. Pero  una renta básica universal de por vida tiene unos riesgos enormes. En lugar de ayudar, pueden acabar eliminando los estímulos a quien la recibe. O ejercer el 'efecto llamada' a millones de pobres del mundo entero.

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