El libro recomendado por Errejón: la biografía de un nacional bolchevique

Poco antes de pasar a su extraño silencio, Íñigo Errejón, el número 2 de Podemos, hizo el siguiente comentario en su cuenta de Twitter: "Una joya. Biografía que es novela, historia y reflexión. Apasionante la vida que cuenta y deliciosa la forma de contarla".

Se trata de la biografía de Edouard Limonov. La portada mostraba que estaba escrito por el francés Emmanuel Carrére.

¿Limonov?

Nacido en Ucrania en plena Segunda Guerra Mundial, Edouard Savenko (su verdadero nombre) fue concebido bajo las bombas en la ciudad de Dzerzhinsk. Su padre era un oficial de la policía secreta, la terrorífica NKVD, y su madre era hija del gestor de un restaurante estatal que se había quedado dinero de la recaudación. El padre fue enviado a un campo de castigo y allí murió.

Fue una época dura. "Veinte millones de rusos murieron en la guerra pero veinte millones afrontaron la posguerra sin techo", dice el autor de la biografía.  Por todas partes había "bandas de niños abandonados a ellos mismos, niños de padres muertos en la guerra o enemigos del pueblo, niños hambrientos, niños ladrones, niños asesinos, niños devueltos a la edad salvaje, desplazándose en hordas peligrosas y por culpa de lo cual, la edad de la responsabilidad criminal, es decir, de la pena de muerte, se redujo a los doce años de edad".

Uno de esos niños fue Eduard.

Como sabía que no era el más fuerte del barrio, se procuró una navaja. Formó parte de una banda, y un día, cuando una chica no quiso bailar con el jefe de la banda, Eduard sacó la navaja y la amenazó. También con la banda participó en una violación colectiva cuando fue adolescente. Ese era Limonov.

Poeta a finales de los años cincuenta, tomó el nombre de Limónov durante una tarde con sus amigos poetas, donde jugaron ponerse seudónimos: Limonov por limón, por su estilo ácido.

Así fue como Limonov empezó a destacar en los círculos artísticos.  Se mudó a Moscú con su primera mujer. Luego, emigró a los Estados Unidos en los años setenta con su segunda mujer y allí experimentó de todo y con todo: la pobreza, vivir en la calle, pedir dinero, hacer de sirviente e incluso, dice el autor del libro, tuvo experiencias homosexuales con un negro de lo cual emergió un libro que causó escándalo: Los poetas rusos prefieren los negros grandes.

Escribió dos obras más en Nueva York, una de las cuales, Diario de un fracasado, tuvo mucho éxito en París. Allí fue con otra mujer rusa en 1982 con la que se casó.

Fue entonces cuando empezó a colaborar en multitud de publicaciones: desde el comunista 'LHumanité, hasta el de extrema derecha Le chic du mois. Así nació poco a poco la ideología nacional comunista de Edouard Limonov.

Al caer la Unión Soviética en 1991, Limonov regresó a su país y comenzó su verdadera actividad política. Su pensamiento político era confuso, pero bajo la influencia de un ideólogo llamado Alexander Duguin "se volvió aún más confusa". Por ejemplo, "en lugar de oponer al fascismo y al comunismo, Duguin las venera igualmente de modo que pone en el mismo panteón a Lenin, Mussolini, Hitler...", dice Carrère. En el ámbito cultural, Duguin juntaba al místico fascista italiano Julius Evola, con el escritor nacionalista alemán Ernst Jünger, Wagner, Lao-Tsé, Che Guevara, Rosa Luxemburgo... Como dice el autor de la biografía, solo les faltó invitar a Charles Manson. Un pastel.

Limonov fundó el Partido Nacional Bolchevique. Sus miembros fueron tachados de 'nazbol'. Su ideología: ultranacionalista rusa, con nostalgia por los viejos tiempos. La base: los eslavos. El objetivo: la expansión de todo lo eslavo, desde Europa hasta Kamchatka. El régimen: estalinismo. La estética: banderas rojas con un círculo blanco y en el centro, la hoz y el martillo. Fusión de la bandera nazi y la comunista. La diseñaron entre Duguin y Limonov. Tenían algo en común: odiaban la democracia moderna.

Un día, durante una manifestación, Limonov tomo el altavoz y gritó que en los pocos años de democracia, Rusia había sufrido más que durante el comunismo. Que los nuevos demócratas solo querían traicionar a la gran Rusia.

Como Limonov era un activista, se dirigió a Yugoslavia a combatir junto a los serbios y a pegar tiros contra los bosnios musulmanes en Sarajevo. Al volver, fundó un periódico extremista e incendiario Limonka (Granada), promovió el golpe de estado y la guerra civil, por todo lo cual en 2001 fue enviado a la prisión de Lefortovo. Su mayor enemigo era ahora Putin.

En la cárcel escribió varios libros que fueron aupados por la crítica. Como político quizá fuera un desastre pero como poeta era bastante bueno, según los críticos.

En 2007, el Partido Nacional Bolchevique se unió a la alianza Otra Rusia, liderada por el campeón de ajedrez Gary Kasparov, para crear un frente común en las elecciones.

Hoy, Limonov tiene 73 años y sigue participando en manifestaciones contra Putin y Mevdeved, los dos hombres que gobiernan el país. En 2010, el escritor francés Emmanuel Carrère le convenció para convivir con él tres meses y escribir una biografía. Carrère era hijo de madre georgiana y sovietóloga. El resultado fue Limonov, una biografía novelada escrita en presente histórico como un documental. Muchos dudaron sobre qué parte era ficticia y cuál la verdadera en la vida de Limonov.

En la imagen de la derecha aparece Carrere a la izquierda, cuando presentó el libro en 2011. Se publicó en español ese año  por la editorial Anagrama. "Limónov no es un personaje de ficción. Existe y yo lo conozco", dijo Carrère a los escépticos.

El libro recibió el premio Renaudot que se concede a obras que destacan en francés. Muchos no se ponían de acuerdo sobre el contenido: ¿era una apología de Limonov?

Seguramente solo era el caso de un autor fascinando por un personaje con una vida, digamos, fuera de la ordinario.

Para Iñigo Errejón, la vida novelada de Limonov anima a la reflexión. ¿Comunista? ¿Nazi? ¿Patriota? ¿Nacionalista ruso? ¿Paneslavo? ¿Xenófobo? ¿Antisemita? ¿Bolchevique? ¿Anticapitalista? ¿Antidemócrata?

¿Qué es lo que atrajo a Errejón de Limonov? ¿Solo el libro?