OPINION

Así es Ignacio Sánchez Galán, la temible locomotora de Iberdrola

sanchez galan
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En el verano de 2001, poco después de llegar a la vicepresidencia de Iberdrola (y consejero delegado), Ignacio Sánchez Galán se dirigió al director de distribución de la compañía y le dijo lo siguiente:

-Tenemos que evitar este verano que se nos vaya la luz en España.

-Imposible, le dijo el directivo. Nuestras instalaciones no lo pueden garantizar.

-¿Cómo que no? ¿Le he prometido a Rato que no iba a haber caídas?

El director de distribución le aclaró que cada vez más españoles se instalaban aparatos de aire acondicionado –y cuando venían días calurosos–, no había forma de mantener el suministro de energía eléctrica. Seguramente se caería el sistema en algún sitio, como solía venir pasando en los últimos veranos. “No hemos realizado las inversiones oportunas en la red, están anticuadas, bla bla…”

Sánchez Galán le dijo que si no podía afrontar ese desafío lo despediría. A continuación fue a hablar con el director de Recursos Humanos para decirle que despidiera al director de distribución. Este le dijo que eso era imposible, que era un directivo histórico, que...

También fue despedido.

Luego, Sánchez Galán hizo el mayor despliegue logístico que se recuerda en la historia de la electricidad en España: contrató todos los camiones generadores eléctricos disponibles en España y reforzó con ellos los puntos más débiles de la geografía. Aquel verano, casi nadie se quejó de los apagones. En 2006 fue nombrado presidente ejecutivo.

Les presento a  Ignacio ‘me lo llevo todo por delante’ Sánchez Galán. Para algunos, una locomotora que arrolla todo a su paso. Para otros, el hombre que convirtió e Iberdrola en un gigante eléctrico y sobrepasó a Endesa, la vaca sagrada del sector.

No hay cosa más entretenida que pararse a escuchar las historias que se cuentan de Sánchez Galán. Un día falleció la madre de uno de sus principales directivos. Sánchez Galán, casi en pleno entierro, le hizo esta oferta ‘que no podrás rechazar’. “Ya tengo los billetes para que tú y tu mujer os vayáis a descansar a las islas Mauricio después de este duro trago”. ¿Cómo? ¿Islas Mauricio? El directivo no aceptó… pero lo agradeció.

Porque Sánchez Galán es exigente con sus directivos, les somete a un acoso casi ilegal, pero a cambio, los mima en sus momentos más duros. "Pero es un tipo complicado", dice alguien que le conoce de cerca.

Gran negociador, no se doblega ante los políticos, aunque sea Mariano Rajoy o su ex ministro de Industria, José Manuel Soria. Hace años, Sánchez Galán dijo en público que se sentía más una empresa británica o norteamericana que española. ¿Me lo puede repetir? Sí, eso. Porque en España se sentía peor tratado que en México: maltratado por el sistema de cálculos de precios de la electricidad aprobado por el gobierno. Por la política energética. Por el castigo a los resultados de su compañía Por…

Se refería a que el Gobierno había obligado a las grandes empresas eléctricas a asumir el déficit de tarifa: 25.000 millones de euros. Es decir, España tenía unas hermosas empresas de energía solar y termosolar que "costaban mucho y producían poco", según las definió Sánchez Galán.Como la electricidad que producían no sufragaba lo que costaba, se fue creando un agujero que llegó a 25.000 millones de euros. El gobierno lo resolvió haciendo pagar a las eléctricas y a los ciudadanos.

Los ciudadanos se quejaron a gritos por la subida de la electricidad. Echaron la culpa a las eléctricas.

Así que Sánchez-Galán dijo al gobierno: ¡Que te den…! Puso un anuncio a toda página en la prensa para demostrar que la electricidad en realidad era muy barata, pero el gobierno, con sus políticas, la hacía cara.

El anuncio era un poco confuso, pero el gobierno entendió el mensaje pues lo calificó caso de 'golpe de Estado’. Así al menos lo escribía el periodista Graciano Palomo en elconfidencial.com.

Y no solo desafía a Rajoy. También a la actual presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.

Cuando era ministra de Energía en tiempos de Lula da Silva, en una reunión, Dilma Rousseff le dijo que iba a nacionalizar las empresas de energía, entre ellas, la planta eléctrica de Iberdrola en Brasil.

Sánchez Galán le dijo que no hiciera eso.

-Ah, ¿no?-, contestó la ministra mirando a este hombre desafiante.

-Si lo hace, le prenderemos fuego a la central y luego diremos que ha sido un accidente. Cobraremos el seguro y ustedes se quedarán si energía eléctrica en esa zona.

-¿Sabe una cosa?, –dijo Roussef–, creo que podemos empezar a negociar.

Posteriormente, en una visita a España, Roussef fue paseada a bordo de un helicóptero por todas las plantas eólicas y convencionales de eléctricas. Helicóptero pagado por ‘su amigo’ Ignacio.

Este año cumplirá 15 años al frente de Iberdrola. Tiene 65 años. ¿Hora de jubilarse? Ni lo sueñen.

Nacido en Salamanca bajo el signo de Libra, es ingeniero industrial por la Universidad Pontificia de Comillas, tiene master en administración de Empresas por ICADE y EOI. Su experiencia profesional demuestra que ha hecho ‘la mili empresarial’: Tudor, Industria de Turbo Propulsores, Eurojet y Airtel, donde fue consejero delegado antes de saltar a Iberdrola.

Hace dos años fue nombrado el mejor CEO (consejero delegado) de las empresas eléctricas europeas. A lo mejor es porque este hombre es capaz de causar cortocircuitos al gobierno. Gana unos 7,4 millones de euros, entre salario y bonificaciones.

Si existen poderes fácticos, Sánchez Galán es uno de ellos porque dirige la empresa eléctrica más poderosa de este país, una multinacional, un gigante.

Distanciado de Mariano Rajoy y peleado con el ya ex ministro de Fomento, se dice que Sánchez Galán apoyó como solución política al centrista Albert Rivera en las pasadas elecciones. Es algo que no se ha podido probar, pero lo que sí es un secreto a voces es que de los populares no quiere ni oír hablar.

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