OPINION

Esperando el tuit de Pablo Iglesias sobre la 'Toma de Caracas' por el pueblo

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Ayer me conecté varias veces a Twitter para encontrar algún tuit de Pablo Iglesias sobre la gigantesca marcha organizada por el pueblo venezolano para exigir un referéndum. Ya saben: referendum=urnas=votos=democracia.

Dado que a Pablo le preocupan los pobres, los abandonados, los aplastados, los perseguidos, los encarcelados por las dictaduras, y los que pasan hambre, así como la voluntad del pueblo expresada en la calle, pensé que el líder de Podemos les enviaría algún cariño por Twitter. Ayer hubo una manifestación de cientos de miles para pedir un referéndum.

Nada. Ayer Pablo usó esta red social para decir que 34 años después de las Guerra de las Malvinas, le dedicarían un recuerdo en el programa de televisión Fort Apache. ¿Malvinas? ¿34 años? ¿Guerra? ¿En serio que eso era lo que le preocupaba ayer a Pablo? ¿Ni un saludo al sufriente pueblo de Venezuela?

Los de Podemos siguen pensando que los cientos de miles que se manifestaron ayer en Caracas eran de la ultraderecha. No. Era el pueblo. De todas las clases. De todas las profesiones. De todas las razas. Hasta los indios fueron en una larga marcha que partió del mismo Amazonas días antes. Los indios, ¿son de la ultraderecha? Vaya, no había caído.

Creo recordar que en la tesis doctoral de Iñigo Errejón sobre "La lucha por la hegemonía del primer movimiento del MAS en Bolivia", el líder de Podemos hablaba de los indios y los pobres como el 'populus" auténtico de Bolivia.Los blancos de origen español eran los malos.  ¿Y los indios venezolanos? Agentes de la CIA disfrazados, supongo.

Maduro y sus huestes hicieron todo lo posible por bloquear, obstaculizar, detener y disolver las manifestaciones. Se habían concertado tres puntos de encuentro, los cuales se llenaron por masas de venezolanos.

Ni siquiera en tiempos de Chávez se logró acumular tanto gentío a pesar de las dificultades. Porque esta gente de ayer no vino pagada ni presionada como iban las masas de chavistas, a los que se les ponían autobuses, y a los que se les amenazaba con echarles del puesto de trabajo si no iban.

Pero estos cientos de miles de ayer han ido porque están hartos de pasar hambre. Y penurias. Están hartos del hampa y de la corrupción. Y de los abusos de Maduro y su cuerda de criminales.

El próximo paso es hacer una marcha ante el Consejo Nacional Electoral y exigirle lo que exige la ley: que convoque un referéndum ya para revocar a Maduro.

Mientras pasa todo esto en Venezuela, Izquierda Unida, aliado de Podemos en las últimas elecciones, va a convocar una manifestación de apoyo a Venezuela. No se froten los ojos. No es para apoyar al pueblo de Venezuela sino a Maduro, su dictador preferido. Como diría un amigo mío, en España no cabe un tonto más.

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