Lo venezolanos se preguntan: ¿por qué no hay gasolina en el país con más petróleo?

Venezuela es el país con más petróleo del mundo. No es una exageración. Según la BP Statistical Review, que es la fuente más fiable, Venezuela tiene el 17,7% de las reservas probadas de todo el planeta. El segundo país que tiene más reservas es Arabia Saudí con el 15,7%. (Pinchar aquí para ver el informe)

Casi se podría decir que Venezuela flota sobre un inmenso mar de petróleo: 300.000 millones de barriles.

En los últimos tres años, el precio del barril de petróleo ha caído de la cota de los 100 dólares a unos 50 dólares. Eso significa que los ingresos de los países petroleros también han caído a la mitad. Todos los países petroleros han tenido que apretarse el cinturón.

Pero los habitantes de los países petroleros saben que si algo no les va a faltar es gasolina. Quizá no tenga el país tanto dinero, pero por lo menos les quedaba la gasolina. ¿No? Pues eso no ha sucedido en Venezuela. Desde hace varias semanas, los venezolanos hacen cola en las gasolineras para abastecerse de gasolina. Colas de tres horas.

¿Cómo es posible?

La primera razón es la desastrosa gestión del gobierno chavista. Las refinerías venezolanas están tan deterioradas que solo producen una tercera parte de lo que pueden refinar. Desde tiempos de Chávez, el estado ha invertido muy poco en mantener sus refinerías, algo elemental en cualquier otro país. De modo que el petróleo se envía por barco a otros países para que lo conviertan en gasolina. Luego lo traen de vuelta a Venezuela.

El colmo de un país petrolero es que tenga que enviar barcos a Curaçao, una pequeña isla del Caribe, para que le hagan ese trabajo. Pero la isla ahora no lo quiere refinar hasta que el gobierno de Nicolás Maduro le pague lo que le debe.

Y el gobierno venezolano no le paga porque no tiene dinero. No tiene divisas. ¿El bolívar? Es una de las monedas más devaluadas del planeta.

Durante los años en que el petróleo subió de 14 dólares a más de 100 (entre 1998 y 2013), Hugo Chávez podría haber creado otras fuentes de riqueza. Pero en lugar de eso, se dedicó a expropiar empresas para ponerlas en manos de chavistas que no sabían nada de gestionar empresas.

El resultado es que el país empezó a importar desde leche hasta carne. Mientras había dinero en la caja, el país seguía comprando todo en el exterior. Pero ahora que no hay dinero, tampoco hay grandes empresas productoras nacionales, y tampoco hay forma de pagar las importaciones. Esa es una de las principales causas de la escasez, y de que muchos venezolanos estén pasando hambre y hurgando en las bolsas de basura.

Nicolás Maduro ha estado echando la culpa de la escasez de alimentos y productos a una conspiración de los empresarios venezolanos. A los mismos que expropió.

Pero, claro, el último padecimiento de los venezolanos es la gasolina: en el país con más petróleo del mundo, no hay gasolina. La pregunta es: dado que la gasolina está en manos del Estado, ¿a quién le va echar la culpa? ¿A él mismo?