OPINION

Desayuna con fundamento gracias a la impresora de tostadas

tostadora
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Es difícil, por no decir imposible, que una tostadora gane un concurso de diseño. Por eso este concepto de Othmar Mühlebach se ha tenido que conformar con el segundo puesto en los Premios de Diseño Berner. Y muy posiblemente hubiera ganado el primero si su impresora de tostadas utilizara mermelada en vez de tinta para que los panecillos ya salieran embadurnados de confitura.

No es la primera tostadora que funciona en vertical, pero sí la primera que tiene un sistema de carga de pan de molde similar al de las impresoras tradicionales. Basta con poner la pila de tostadas en la bandeja de alimentación y olvidarse hasta que todas caigan en la bandeja de recogida.

Según el profesor de Othmar en la Universidad de Lucerna, que se alegra mucho del accesit de su alumno, "el diseño de Othmar podría ser modificado para que pudiera grabar cualquier tipo de gráfico sobre el pan, aunque también podría sobrecalentarse el cable USB y quemarnos el ordenador debido a la potencia que se necesita".

Y es que nadie es perfecto en el mundo de las tostadoras matriciales.

El que más se ha acercado a la perfección es la marca Electrolux, que está a punto de comercializar (Dios mediante) su "Scan Toaster", una tostadora-impresora desarrollada por el diseñador japonés Sung Bae Chang en el marco de un concurso de ideas organizado por la corporación sueca de electrodomésticos hace pocos meses.

Este curioso gadget ha sido pensado para conectarlo al ordenador a través de su puerto USB y así poder descargar las noticias o los índices bursátiles para que los podamos leer y luego zampárnoslos llenos de mantequilla. Incluso se puede seleccionar la cara de la Virgen María y hacerse de oro, como hizo en su día la creyente confesa Diane Duyser.

Una matriz de elementos móviles en el interior de la tostadora (que no tiene nada que ver con el funcionamiento de la sandwichera de Trancas y Barrancas que "regala" El País) es la que permite la composición de la imagen que posteriormente se estampará mediante calor en el pan.

Sin embargo, si tenemos que quedarnos con una impresora-tostadora, aunque sólo exista exista en la mente de su creador, apostamos ciegamente por la idea de la diseñadora Sasha Tseng, que además de imprimir tostadas lo hace con cierto fin práctico, pues su tostadora-impresora permite dejar mensajes quemados en la tostada a otros miembros de la casa, que seguro que los ven mejor que en un post-it.

Y no necesita cable USB, sólo una conexión a la corriente eléctrica tradicional. ¡Ñam, Ñam!

Posibilidades de comercialización: 100%, alguna de las tres se tiene que llevar el gato a la manteca ¿No?

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