Para lograr la teta ideal hay que pensar como un ingeniero

La fascinación humana por los senos femeninos ha alimentado la industria de la cirugía plástica durante muchos años. Todas las mujeres entran en la consulta de la clínica con la idea del pecho ideal, pero ¿cuál es el pecho ideal? Difícil de contestar por un cirujano; pero quizá no tanto para un ingeniero, que al fin y al cabo siempre busca el equilibrio.

El doctor norteamericano Gary Horndeski estudió para ingeniero eléctrico. Pero en 1971, en plena Guerra del Vietnam, decidió dar un giro a su carrera sacándose el título de medicina, cuando su hermano murió en el frente.

De sus manos y de sus miles de cálculos matemáticos ha salido una nueva técnica de rejuvenecimiento de mama con vocación de excelencia y dirigida a todas las mujeres con grandes pechos que desean levantarlos o deshacerse de un poco de lastre, con el consiguiente agradecimiento de su espalda y de su estima.

La técnica, basada en conceptos de geometría y de ingeniería mecánica, produce una reducción de la mama, un levantamiento y la elaboración de un implante natural todo en uno. Y sin necesidad de mamas artificiales ni de las grandes cicatrices de los procedimientos convencionales.

Su idea es simple: si los sujetadores sirven para elevar y mantener el pecho ¿Por qué no crear un sujetador interior con los tejidos que nunca haya que quitarse? Este cirujano es capaz de hacer una especie de copas o conos con el tejido sobrante del pecho de la paciente, para adosarlo a la pared torácica con una suerte de correas biológicas que se pueden ajustar para producir un levantamiento en distintos grados, al gusto.

El resultado sería una especie de hamaca con suturas conectadas con el esternón y las costillas, donde descansaría plácidamente cada mama.

Así se elevan. Ahora, ¿cómo se disminuye su peso? Pues para la que quieran quitar volumen no hay otra que hacer dieta. Pero una dieta controlada. La técnica de pérdida de peso es similar a la de un circuito de retroalimentación negativa. Se utiliza una malla de polipropileno para reforzar la debilitada fascia abdominal, el tejido elástico que soporta la pared abdominal.

La malla empuja los músculos abdominales, que a su vez ejercen presión sobre el estómago para crear la sensación de estar lleno. Horndeski inserta un expansor que progresivamente aumenta la presión sobre el estómago, por lo que la persona quiere comer menos. Después de lograr la pérdida de peso deseada, se quita el expansor y se pone en malla para mantener la presión permanente.

Esta técnica es menos invasiva y produce menos complicaciones o efectos secundarios que la cirugía de bypass gástrico o de banda gástrica. Horndeski desarrolló esta técnica de pérdida de masa corporal después de observar a sus pacientes de abdominoplastia fácilmente perder peso y mantenerlo después.

Antes-después

"Mucha gente me odiará por hacer esto", dice el Dr. Horndeski, que dirige una clínica de cirugía plástica en Sugar Land, Texas. "Va a causar mucha controversia, ya que se trata de una desviación de las técnicas estándar”.

Efectivamente, los procedimientos médicos en cirugía estética evolucionan lentamente debido al temor de demandas por negligencia y los médicos no quieren cambios radicales que puedan ponerles en peligro. Y esta técnica no deja de estar basada en ingeniería, en fuerzas y tensiones, algo que incluso para un médico puede suponer un terreno resbaladizo.

Horndeski ha ido perfeccionando su técnica de reducción mamaria y elevación en la última década y ya la probado con tres de sus pacientes, que han salido totalmente encantadas. La primera, Cheryl Waller, una mujer de 64 años que tan sólo estuvo en el quirófano unas 4 horas para una experiencia que le cambiará el resto de su vida. Y también lo realizó con éxito en el pectoral de la joven Jordan West, de tan solo 20 años, a quién corresponde las fotos del antes-después de arriba.

Horndeski ahora tiene una patente pendiente sobre la técnica y está esperando la aprobación del hospital general de Angleton Danbury en Texas, para expandir esta cirugía a todas las mujeres que lo necesiten, bajando el peso de las mamas sin las grandes cicatrices asociadas y colocándolas al nivel que, tanto mujeres como también hombres, siempre han deseado.

Dios te bendiga por ello, Dr. Horndeski.

Vía Fox News