OPINION

7 minutos para dejar la empresa...en calzoncillos

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Alen Rabek, de 34 años, residente en la croata ciudad de Porec, llevaba tiempo sopesando abandonar su puesto de trabajo en una contrata de gas. Tras 7 años de trabajo, había reunido las fuerzas suficientes para decirle a su jefe que tenía la intención de renunciar a su puesto.

Habló con el director y le comunicó su decisión, preguntándole a continuación con cuántos días de aviso había que formalizar la baja. El jefe en vez de informarle, reaccionó como sólo puede reaccionar un jefe encendido:

- "Quítate el mono de trabajo y abandona la empresa ahora mismo, Molimništazato" (por la dureza del idioma croata, omitiremos el insulto).

Alen Rabek tuvo que obedecer ante la presencia de los guardias de seguridad. Pero aunque llevaba 7 años trabajando en la empresa, 7 semanas sopesando la forma de decírselo y hasta había barajado 7 posibles consecuencias de su meditada decisión, ése día se había puesto, como siempre, el mono sobre los calzoncillos para ir a trabajar.

Los mismos calzoncillos con los que tuvo que llegar a casa andando, humillado pero, en el fondo, contento; contento por abandonar una empresa que así le pagaba siete años de abnegado servicio.

Es una hermosa historia gayumbera vista en el Croatian Times.

La foto es de una campaña de publicidad de 2007 de la web de búsqueda de empleo jobsintown

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