La policía de San Petersburgo está que trina con la última «acción» del grupo de artistas-activistas Voina («Guerra», en ruso): volcar los coches patrulla de la policía y adornarlos con leyendas del tipo «¡ayuda a los niños, ayuda a tu país!» o «que le jodan a la policía». Lo más sorprendente del caso es el método que utilizaron para poder perpetrar su acción: maniataron a los agentes en rejas y señales de tráfico con candados de bicicleta.
Según informa la agencia Moscow News, «se trata de una acción minuciosamente coordinada» en varios puntos de la ciudad. Una vez ejecutada la felonía, los artistas colgaron las imágenes en su blog [cerrado en el momento de redactar esta noticia], de donde las obtuvo la agencia rusa.
El colectivo Voina saltó a la fama el pasado mes de junio cuando recibieron a los miembros del Fondo Monetario Internacional con otro «miembro»: un gigantesco falo que se erigía en el puente de Liteiny en la antigua Stalingrado. La llamada «Polla Gigante del Espacio Exterior» medía 70 metros de alta y fue pintada en sólo 23 segundos. Otros «grandes éxitos» de este grupo de provocadores fueron la sesión de sexo en grupo en el Museo Biológico de Timiziarev o el lanzamiento de gatos vivos a los trabajadores de un restaurante de McDonald's el Día de los Trabajadores «para romper la monotonía de su rutina diaria».
La performance antipolicial del colectivo Voina es más rara aún de las que se hacen por estos pagos, pero nada del otro jueves, teniendo en cuenta el tipo de bromas que se gastan en San Petersburgo.
Visto en Moscow News.
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