Menganno, el superhéroe argentino de carne y hueso

Como los lectores de Strambotic saben bien, Fulano es el nombre más usado en el mundo para designar a uno cualquiera. ¿Y quién suele acompañar a Fulano en sus peripecias? Pues Mengano, claro. Así se llama –con doble “n”, a la italiana- el superhéroe argentino que pretende desfacer entuertos en las calles de Aldo Bonzi, una ciudad de la provincia de Buenos Aires.

Menganno, de 40 años, cuenta entre sus superpoderes conocimientos de aikido y boxeo, y una moto de 125, remedo tercermundista del Batmóvil. Y es que el vehículo, el traje e incluso el propio vídeo de Crónica TV demuestra el abismo que hay entre los superhéroes del opulento norte y los del sur venido a menos. ¿Quién ganaría en un combate en la Cúpula del Trueno, Menganno o Phoenix Jones, el superhéroe de Seattle? Pregunta errónea: se unirían para combatir el mal.

Que se sepa, Menganno no ha impedido aún ningún delito, aunque ha logrado espantar a algunos malhechores con su presencia. En la entrevista, Menganno muestra tanta bonhomía como ingenuidad. Sin ir más lejos, sugiere a los malosos la posibilidad de usar su escudo con la bandera argentina como diana cuando ande patrullando en moto (minuto 3:34).

El enigmático Menganno reconoce que su mayor superpoder es “llamar la atención” y que su humilde cometido es conseguir que los damnificados por el crimen le llamen a él, que él se encargará de llamar a la policía. De este modo, más que como alternativa a la ley pretende actuar como teleoperador freelance.

Menganno utiliza Facebook como vía de comunicación con sus 17.000 seguidores. La película favorita de Menganno es “El secreto de sus ojos” y su cantante preferido es Eros Ramazzotti. Temblad, malevos.

La delincuencia rampante en Argentina ha provocado el surgimiento de otros superhéroes, como Super Zeta o Capitán Austral y sus Secuaces, según averiguamos en Cuatro.

Y además:

-Superhéroes reales patrullan las calles de las ciudades de EEUU.

-Le rompen la nariz a Phoenix Jones, el superhéroes de Seattle.