OPINION

El único coche en el mundo al que le ha impactado un meteorito

meteorito2
meteorito2

El meteorito de Peekskill es, posiblemente, uno de los avistamientos de meteoritos más famosos del mundo. Y quién sin duda fue protagonista de primera mano aquel 9 de octubre de 1992, día en que el bólido entró en la atmósfera y se fragmentó a lo largo de Kentucky, es la norteamericana Michelle Knapp.

Esta chica, que por aquel entonces tenía 17 años, conducía de vuelta a casa con un Chevrolet Malibu cerca de Peekskill, Nueva York, lugar donde cayó uno de los trozos, que atravesó literalmente la parte de atrás de su auto.

Este Chevy rojo tiene el honor de ser el único coche en el mundo al que le ha impactado un meteorito y acaba de ser enviado desde un garaje en Nueva York para ser la estrella de una exposición sobre los meteoritos en el Museo de Historia Natural alemán en Oldenburg.

El padre de Michelle; el coche era suyo.

Michelle recuerda que al principio no se dio cuenta de lo que pasaba hasta que oyó el tremendo impacto en la parte posterior del maletero. Entonces salió con un amigo, que iba en el asiento del copiloto, para investigar el ruido; y cuando vieron a los daños sufridos por el automóvil, buscaron debajo de él y descubrieron el meteorito, situado en un pequeño cráter que había hecho en la calle. Estaba todavía humeante.

Gracias a los muchos vídeos disponibles (casi 16 distintos) de los casi 40 segundos en que el meteorito cruzó varios estados, los astrónomos pudieron calcular el ángulo con el que había impactado contra la atmósfera terrestre, que fue de 3.4 grados.

http://youtu.be/B17TmSSb5aI

La roca "Peekskill" pesó en báscula 12 kilogramos y, a pesar del impacto, sobrevivió al accidente intacta; sólo terminó con una mancha pequeña de restos de pintura roja del coche a la izquierda de su superficie.

El meteorito fue cedido también al museo alemán y se exhibirá al lado del coche, justo en el sitio donde una incrédula Michelle Knapp le echó el ojo por primera vez. Por cierto, se desconoce si la mujer tenía el seguro al día contra imprevistos cósmicos, pero el caso es que el coche se ha conservado tal y cómo quedó aquella noche.

Vía Meteorito-meteorite y NASA

Mostrar comentarios