Bruselas está en Dinamarca. Así es el mapa del tiempo de Telemadrid. La geografía parece no ser el fuerte de alguno de los empleados que se ha salvado del ERE que ha afectado a más de 800 trabajadores de la cadena autonómica.
Gran parte de los despedidos de Telemadrid consiguieron su empleo gracias a un complicado examen público e, incluso, vieron sus plazas publicadas en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid. Creían que habían aprobado una 'oposición' que les daba acceso a un “trabajo para toda la vida”. Se equivocaban.
La actual dirección ha expulsado a la inmensa mayoría de los profesionales imprescindibles para hacer televisión: cámaras, realizadores, mezcladores, sonidistas, montadores, productores, redactores, peluqueros, maquilladores…
Así que, para poder seguir emitiendo, Telemadrid ha tenido que contratar los servicios de Telefónica. Ésta es la gran contradicción del ERE. Y es que, tras la marcha forzada de estos 861 trabajadores, la cadena pública destinará 29 millones de euros a “servicios exteriores” que reemplacen las funciones de los empleados salientes. ¿No se podía minimizar costes aprovechando una mayor parte del personal de la casa?
Al final, parece que hay decisiones que prefieren la débil inestabilidad laboral que fomentar el valor añadido de la experiencia. Y, claro, luego pasa que no sabemos ni dónde está Bruselas en un mapa.
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