"Si votas a Abraham para que gane esta noche #Supervivientes2014 entras en el sorteo de un viaje a Ibiza para 2 personas el 26 de Julio a gastos pagados". Así promovía el televoto el Instagram de Abraham el día de la final de Supervivientes.
Un hecho inaudito. Para participar en la rifa sólo había que reenviar el sms de confirmación del voto a un número móvil. De ahí se sortearía un viaje... ¡con cena incluida con el propio Abraham!
Y, al final, Abraham ganó. Se hizo con los 200.000 euros de premio y un coche de alta gama. En la isla demostró ser uno de los mejores supervivientes. Su resistencia física fue la revelación de esta edición del programa. Probablemente, no necesitaba este empujón para llevarse el premio. Pero desde sus redes sociales oficiales se animó al voto con un suculento viaje a Ibiza.
Lejos quedan ya aquellas polémicas que surgían cuando determinados ayuntamientos ponían teléfonos gratis para favorecer el voto del vecino del pueblo que participaba en el reality de turno. Eran otros tiempos. Ahora las redes sociales fomentan estrategias más sofisticadas, sin duda.
Y ADEMÁS...
‘Supervivientes’ o la muerte del reality tal como lo conocíamos
Supervivientes: sus seis armas para el triunfo
Jorge Javier Vázquez, el presentador superviviente
¿Por qué las series y los programas empiezan y terminan tan tarde?
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios