El Ministerio del Tiempo ha cerrado su primera temporada demostrando que cuenta con un público más que fiel. A pesar de la dura competencia con el final de Bajo Sospecha y las exitosas audiciones ciegas de La Voz, más de dos millones de fieles (10,8% de share, sin contar aquellos que lo consumen en la web) no faltaron a la despedida de esta serie de aventuras que reúne los requisitos que debe primar una cadena pública de la talla de TVE: personalidad propia, originalidad, calidad visual, trasfondo de idiosincrasia nacional e incluso un punto de humor, cargado de valiosos guiños cómplices al espectador.
Y en ese juego de jugar con el público y saltarse líneas de lo políticamente correcto, anoche apareció Jordi Hurtado por El Ministerio. Sorpresa: también es funcionario. Aunque sólo pasaba por allí para teletransportarse a la grabación de su Saber y Ganar. Ya sabíamos que el presentador cuenta con superpoderes, pero las puertas del tiempo, por tanto, deben de tener la clave del secreto de su eterna juventud.
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