OPINION

20 años del estreno de ¡Qué me dices!: el programa que revolucionó la crónica rosa

QUE ME DICES TELECINCO
QUE ME DICES TELECINCO

Tal día como hoy, 27 de julio, de hace dos décadas, Telecinco estrenaba un nuevo formato en su sobremesa. Se trataba de un informativo satírico de nombre ¡Qué me dices!. El título ya presagiaba que no era un espacio de crónica rosa como los que venía acostumbrando la televisión de los noventa: con mucho corasón, corasón pelota, trascendente y con nula capacidad crítica.

En ¡Qué me dices! se rompía con los clichés de la revista ¡Hola! con una inteligente mirada cargada de sano humor, que derribaba mitos, huía de las informaciones cortesanas y creía en la comedia. Porque hasta con el cuore se puede hacer comedia.

Y para romper moldes, el programa contó con una extraña pareja de presentadores: Belinda Washington y Chapis. A él, con su particular forma de hablar, casi ni se le entendía, pero no pasaba nada: transmitía. De hecho, los dos contagiaron un carismático buen rollo que hizo tambalear la programación de la competencia a esas horas.

La fórmula de ¡QMD! incluso logró superar en audiencias el último tramo de los -por aquel entonces indestructibles-Telediarios de La 1, que desde ese instante incorporaron noticias con mayor carga de entretenimiento en los minutos finales de cada edición.

¡Qué me dices! supo reírse del grueso de la crónica rosa, una información que nunca hubo que tomársela demasiado en serio. Lo hizo con unos vídeos que contaban los cotilleos con una magnética (y maquiavélica) ironía, donde la locución, el montaje y la sonorización (con selecciones musicales disparatadas) supuso una importante evolución para las narrativas audiovisuales del momento.

También en las presentaciones de Belinda y Chapis, siempre arropadas por la denominaban 'Cla', el ruidoso equipo atrincherado detrás de las cámaras para animar el cotarro. Nunca unos pasos a vídeo tuvieron tanta interacción, con cuchicheos, aplausos o abucheos aportados por los propios compañeros, como elemento complementario para contagiar al espectador esa esencia de programa vivo y desenfadado. Nadie se podía quedar dormido a la hora de la siesta.

En 1997, el programa sacó su propia revista al mercado, editada por Hachette (hoy Hearst), que se mantiene como referencia del género. Ya no tiene dibujadas en sus páginas las caras de Belinda y Chapis, pero siempre será fruto de aquel espacio que acabó con esa ñoñez con la que se explicaban solemnemente las noticias rosas.

¡Qué me dices! despareció en 1998. La llegada de Extra Rosa a Antena 3, con Rosa Villacastín y Ana Rosa Quintana, provocó una importante bajada de audiencias. Telecinco y Globomedia, productora creadora de ¡QMD!, introdujeron algunos cambios con más colaboradores en escena. Pero ya era demasiado tarde. La competencia había dado otro paso más allá en la información rosa de sobremesa: la charleta entre amigas y conocidas periodistas.

No obstante, la esencia de ¡Qué me dices! sigue vigente en nuestra tele. Hubo un antes y un después en Telecinco desde la emisión de este formato inolvidable, que supo entender las trascendencias e intrascendencias de la crónica social de un país de folclóricas... y folclóricos, dentro y fuera de la tele. Eso sí, luego llegó Aquí hay tomate y el asunto se empezó a ir de las manos.

@borjateran

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