OPINION

'Gran Hermano VIP': el fracaso de un casting (y los intentos para remediarlo)

GRAN HERMANO VIP REGRESO ESTEBAN
GRAN HERMANO VIP REGRESO ESTEBAN

El casting de esta cuarta edición de Gran Hermano VIP no funciona. Es un hecho. Y Telecinco lo sabe. Curiosamente, el asunto no es demasiado preocupante para el share, pues sus datos de audiencia siguen siendo aceptables (el público fiel al reality de Telecinco es así, casi inamovible y con mandos a distancia propensos a la inercia), pero la repercusión social y en redes del programa dista enormemente de lo conseguido en la edición anterior.

Los habitantes de la casa, sencillamente, no crean conflicto. Se dedican a vagar sin gracia por ese hogar de Guadalix. Así que, antes de que el sopor vaya a peor, los responsables de GH han tomado decisiones de choque. ¿Que los de este año no funcionan? Pues nos inventamos un balneario de invitados temporales y metemos a los del año pasado. Aunque sea unos días para que intenten animar el cotarro. Como sea.

Sin duda, el hecho de volver a ver en la casa a Víctor Sandoval, Belén Esteban, Ylenia o Kiko Matamoros (que también participó en la edición VIP de 2005) es una clara medida desesperada de Telecinco, que asume así que su casting de este año le ha salido defectuoso, aburre y no sirve para mantener vivo el show. Y si algo tiene claro la cadena, es que cuando se trata de dar espectáculo, poco importan las supuestas normas que sustentan el reality.

¿Recordáis aquello de que los que venían de fuera tenían prohibido dar cualquier información del exterior? Da la sensación de que a Víctor Sandoval, por ejemplo, le han dado instrucciones totalmente contrarias, porque nada más entrar en la casa, no ha parado de intentar desquiciar a los concursantes llamándoles "muebles" (por el nulo juego que dan vistos desde fuera) o aportándoles datos que les puedan perturbar (a Rosa Benito le ha dicho que la ex gran hermana Mayte Galdeano intenta conquistar a Amador Mohedano).

El objetivo de los visitantes es descolocar, inquietar y generar el ansiado conflicto entre los habitantes de la casa. Y todo vale con tal fin. Rosa Benito y Raquel Bollo han sido las principales destinatarias de las pullas de Sandoval y Matamoros. Con estas "indirectas", a ambas les ha resultado evidente que, como concursantes, están pasando mucho más desapercibidas de lo que se esperaba. Ellas son, quizá, la gran decepción de esta edición, pues, curtidas como están en las entrañas de Sálvame, prometían mucho más juego del que finalmente han dado. Y bueno, ahora al menos Sandoval ha conseguido que las dos se estén comiendo la cabeza por si tienen descontento al mandamás de la cadena Paolo Vasile...

Así es la televisión. Así es Gran Hermano, capaz de recurrir a rostros de la infalible pasada edición, donde el casting funcionó tan bien. Veremos estos días qué consiguen Belén Esteban o Ylenia. Que no cunda el pánico. El nuevo pijama de la Esteban aún puede salvar el show.

> ‘Gran Hermano’: así manipula tus emociones

@borjateran

Y ADEMÁS…

> Cómo manipular a los concursantes de ‘Gran Hermano’ en cuatro sencillos pasos

> Los problemas de la última edición de 'Gran Hermano VIP'

> Los límites éticos que ‘Gran Hermano’ aún no ha sobrepasado

> Mamá, quiero ir a Gran Hermano. Los nuevos referentes televisivos

Lo que esperamos de la nueva temporada televisiva

‘Gran Hermano’, el superformato que reinventó la televisión

Mostrar comentarios