OPINION

'Aquí no hay quien viva': motivos que la convierten en el nuevo 'Verano Azul'

aqui no hay quien viva
aqui no hay quien viva

Aquí no hay quien viva es el nuevo Verano Azul. 13 años después de su estreno, un 7 de septiembre, las tramas de la serie del “un poquito de por favor“ siguen vigentes y su reposición no cesa en canales como Neox o Atreseries. Sus episodios se repiten con éxito, una y otra vez. Como pasó con la pandilla de Chanquete.

Porque Aquí no hay quien viva, al igual que Verano Azul, ha traspasado las pantallas y se ha instalado en el lenguaje cotidiano de varias generaciones que han crecido con este particular patio de vecinos de una calle llamada Desengaño.

Alberto Caballero e Iñaqui Ariztimuño, bajo la producción ejecutiva de José Luis Moreno, fueron los creadores de esta idea que consiguió adaptar en la televisión la esencia del mítico tebeo 13, Rue del Percebe. No era ninguna adaptación oficial, pero sí compartía con la tira cómica una saludable autocrítica social latente.  Y resultó un retrato de la sociedad española, y de la picaresca nacional, que conectó con audiencias millonarias, ya que todos los bloques de viviendas tienen mucho de aquel vecindario de Aquí no hay quien viva que, además, estuvo encarnado por un carismático casting, una de esas combinaciones mágicas de actores tan difíciles de repetir. Intérpretes muy dispares pero que, sin embargo, encajaron a la perfección unos con otros, otorgando una personalidad inconfundible al guion.

Aquí no hay quien viva sigue muy presente en ese público al que le marcó "radio patio". Incluso colándose en los trending topics,  esos rankings de lo más comentado en Twitter, en estos últimos coletazos del verano de 2016. Porque, como aquel "No nos moverán" de Julia desde el barco de Chanquete, las expresiones de Aquí no hay quien viva llegaron para quedarse. Las coletillas y mucho más, porque una década después del final de la serie, hay fans que hasta crean camisetas de la firma "Paloma Urban Fashion, PUF", en un guiño a aquellos glamourosos trapillos chonis que diseñó el personaje de Loles León en un recordado episodio. La España de pandereta retratada con una habilidad cómica pasmosa en la que no faltó ni una canción de Camela. Se dibujaba una España que si en Verano Azul el público sintió a través de una emoción traviesa, en Aquí no hay quien viva la palpó gracias a la comedia más perversa y cómplice. Porque todos somos uno u otro de los personajes de ese edificio.

Y eso que pocos creían en Aquí no hay quien viva. Lo demuestra el hecho de que fue lanzada en la programación de la cadena como un producto menor y sin prácticamente promoción. Pero, contra pronóstico, cada semana multiplicaba en tiempo récord los espectadores hasta convertirse en una de las series más seguidas de la historia de la televisión privada en España, sólo por detrás de Médico de Familia o Farmacia de Guardia. El episodio más visto, Érase un famoso, congregó frente al televisor al 43,5 por ciento de la audiencia con la colosal cifra de 8.300.000 televidentes. Dato impensable hoy en día para una serie.

Aquí no hay quien viva murió de éxito. Telecinco compró acciones de la productora de José Luis Moreno para robar el producto estrella de su cadena rival y, a medio plazo, la jugada le salió perfecta, pues la secuela no oficial, La que se avecina, pulveriza hoy la cuota de pantalla con toques más histriónicos y mezquinos. Pero la secuela nunca será igual que aquella castiza escalera con Mauri, Juan Cuesta, Paloma, Emilio y compañía que, al igual que Verano Azul, pilló al espectador y a los propios actores desprevenidos. Nadie se esperaba tal fenómeno social, pero ocurrió porque eran y son espectacularmente genuinos. Es lo que tienen los éxitos que no se prefabrican con fórmulas matemáticas para el triunfo, sino que son el fruto de una serie de factores que se alinean para producir magia. Y la magia es eterna, no se agota, como parece que tampoco se agotan las reposiciones de Aquí no hay quien viva.

Así sería la mítica serie ‘Verano Azul’ si se hubiera rodado hoy

@borjateran

Y ADEMÁS…

> Secretos que no sabías de 'Verano Azul'

11 cosas que aprendimos con ‘Friends’

> La asignatura pendiente de la ficción española 

5 razones por las que no podríamos hacer ‘Juego de Tronos’ en España

> 6 contenidos que eran habituales en los programas matinales y que se han extinguido (por suerte)

8 trucos de Chicho Ibáñez Serrador que siguen siendo modernos hoy

4 anomalías de la TV en España que hemos terminado interiorizando como normales

> Los elementos cruciales para el éxito en TV que se han olvidado

Mostrar comentarios