OPINION

Got Talent: la inercia del éxito

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El género de show de cazatalentos es un viaje al pasado televisivo más reciente. España llegó tarde a este tipo de programas, pero los cogió con ganas. De la espontaneidad de Tú sí que vales a la intensidad del actual Got Talent. Aunque es difícil sorprender a un espectador que ya se ha visto todo el catálogo de números visuales de los artistas patrios. Del infalible flamenquito al enigmático prestidigitador.

Sin embargo, mientras que formatos parecidos como Insuperables o Tú sí que sí han pinchado, el retorno de Tienes talento está funcionando a Mediaset con los ingredientes de siempre: un jurado examinando un desfile de variopintas artes. Pero, ¿por qué está tirando este espacio y no otros que ha intentado la competencia de Telecinco?

Para empezar, Telecinco es el canal adecuado para este tipo de producto, ya que ha fidelizado a una audiencia adicta a programas que conjugan el show folclórico-festivo con la emoción. Y Got Talent intenta buscar la emoción-folclórica de la historia personal de cada participante.

No obstante, aunque Telecinco se haya convertido en un canal temático de tele-realidades, el verdadero acierto de Got Talent está en que sigue fiel a su esencia de producto que es muy sencillo de consumir. Se trata, simplemente, de un rápido ir y venir de personas de la calle, que son como tu vecino del quinto y que encima puedes 'cotillear' la forma en la que son juzgadas por unos jueces que, además, son personajes populares de verdad.

El show intenta no cocinarse a medio gas y otorga, con atino, el papel principal en reconocibles rostros y como se relacionan entre sí. Nada de famosos de segunda. En Telecinco cuentan con Jorge Javier Vázquez, Edurne, Eva Hache y Risto Mejide como contundentes protagonistas del invento. Más protagonistas que incluso los artistas, que cumplen una función más efímera. Al final, la televisión regala sus 5 minutos de fama. Y ya.

Ahí está el éxito pero también el fracaso de Got Talent. Un programa bien producido que sirve como mero y barato entretenimiento de varietés pero que, al mismo tiempo, no parece encontrar en España artistas que sorprendan hasta revolucionar la ingenuidad perdida de una audiencia resabiada de la mecánica de este tipo de programas.

Tal vez sea el momento de apostar por otros formatos que airén los contenidos televisivos. Porque la televisión parece que se ha quedado paralizada en 2007. Pero, señores de las cadenas, ya estamos en 2017. La sociedad está avanzando. Los canales generalistas no tanto. Got Talent es un buen formato, pero también es tiempo de explorar nuevas ideas que no repitan, una y otra vez, los mismos patrones clónicos.

@borjateran

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