OPINION

Que alguien enseñe a escribir a Díaz Ferrán

Ayer por la mañana intenté leer la propuesta de reforma laboral que publicó el diario El País y que venía firmada por el presidente de la patronal, Gerardo Díaz Ferrán.

Lo que más me llamó la atención es que no entendía algunas cosas. Tras 25 años de profesión, y a estas alturas, hay cosas que no entiendo. No me refiero al significado de la propuesta: me refiero a que, a pesar de que como ustedes leo y hablo español,  no entiendo en qué idioma está escrita esa propuesta.

En un lugar dice: "Flexibilidad interna en la empresa. CEOE propone negociar la mejora de la flexibilidad interna en la empresa, tanto respecto a las llamadas modificaciones sustanciales del contrato de trabajo como en lo que se refiere a la movilidad funcional y geográfica, siempre que existan razones económicas, técnicas, organizativas o de producción, a fin de dar una respuesta ágil a las necesidades derivadas de éstas".

Creo que intentaba decir lo siguiente: "A los empresarios nos gustaría trasladar a los trabajadores de una ciudad a otra y de un puesto para otro, cuando lo requiera la situación económica, pero no lo podemos hacer porque nos limitan las leyes laborales".

Hay más puntos oscuros. La CEOE se queja del enorme absentismo laboral, es decir, trabajadores que se dan de baja temporalmente por enfermedad común o accidente no laboral y no acuden a su puesto de trabajo. Para ello proponen (cita textual):

"- Que las mutuas tengan la facultad de dar altas a efectos económicos en los mismos términos que el INSS y con similares garantías para el trabajador.

- Alternativamente, la supresión de la obligación empresarial del pago de la prestación de baja por enfermedad entre el cuarto y el decimoquinto día, como sucedía hasta 1992."

Estos puntos no se entienden porque están mal escritos y no añaden ninguna referencia. La CEOE debería haber explicado que cuando se presenta un parte de baja, quien concede el alta es la Seguridad Social. Los empresarios desean que las mutuas de seguros (privadas) también estén facultadas para esa labor, supongo que porque a las mutuas es más difícil colarles partes de baja falsos (en las que el trabajador simula una enfermedad), mientras que un médico de la SS firma cualquier cosa que le pongan por delante.

El segundo punto tiene un problema de construcción gramatical y de claridad. Cuando se presenta una baja por enfermedad o accidente no laboral, los empresarios pagan el subsidio por incapacidad temporal desde el cuarto día de baja hasta el décimo quinto. Luego lo asume la SS. Pero en el texto, al decir "como sucedía hasta 1992" no se entiende qué es lo que sucedía: ¿hasta esa fecha no se pagaba? ¿hasta esa fecha sí se pagaba?

Me parece un documento mal escrito. Una falta de respeto a los que saben español. Un desprecio a todo el mundo. Si ese documento lo ha redactado de su puño y letra Díaz Ferrán, alguien debería enseñarle a escribir. Y si ha pasado por un director de comunicación, con ese documento no se ha ganado el sueldo.

En general, las propuestas de la CEOE pueden resultar más o menos razonables pero desde luego, están mal expuestas. Mucho peor si se tiene en cuenta de que han usado el diario de información general más destacado del país, y que por tanto, deberían haber usado un lenguaje más llano y más claro.

Todo eso ha complicado aún más la imagen de Díaz Ferrán ante los españoles. Entre el desastroso fin de su línea aérea, Air Comet, y sus torpes intervenciones en público, cada vez que los españoles ven la cara de este hombre en la prensa o en la tele, se preguntan si le comprarían un coche usado.

A los sindicatos y al Ministerio de Trabajo les ha escandalizado que la CEOE haya usado un medio impreso para comunicar sus propuestas de reforma laboral. No lo entiendo. Las propuestas ¿les han pillado en calzoncillos? Es lo mismo que viene diciendo la patronal desde hace meses. En las últimas semanas, han aparecido en la prensa tanto los líderes sindicales como miembros del gobierno expresando sus ideas sobre la reforma laboral, y hasta han examinado el modelo alemán y el modelo danés.

No ha sido este documento el que ha desatado la tormenta de críticas sino las palabras de un representante de la CEOE (el director de Relaciones Laborales) que dijo anteayer en el parlamento que su organización deseaba un contrato laboral para jóvenes, el cual no contemplase ninguna indemnización por despido. Es el llamado "contrato de inserción", para que los cientos de miles de jóvenes que están sin empleo, se inserten por primera vez en el mercado laboral.

Para el resto de los trabajadores, la CEOE propone un contrato indefinido con una indemnización que sea más baja de los 45 días actuales, y más altas que los ocho de los contratos temporales.

En fin, sea como sea, la CEOE tiene un grave problema de comunicación, tanto hablada como escrita.

Mostrar comentarios