OPINION

Los alemanes tienen miedo

stern euro
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[caption id="attachment_2260" align="alignleft" width="222" caption="Portada de Stern: ¿Qué pasará con nuestro dinero?"][/caption]

La revista Stern acaba de publicar una encuesta sobre las preocupaciones de los alemanes y en primer lugar aparece el temor a que se dispare la deuda del Estado por culpa de la crisis del euro. Tres de cada cuatro ciudadanos confesaron mucho temor a la gigantesca deuda que el estado ha adquirido en los últimos días para pagar a los manirrotos griegos o para defender al euro de los especuladores.

Según informaba Die Welt en marzo pasado, la deuda del Estado alemán es de 1,9 billones de euros, casi cuatro veces la de España. Es verdad que la economía alemana también es casi cinco veces más grande que la española, pero aun así, los alemanes están asustados de que su gobierno central y los lander tengan unas cifras tan grandes de deudas.

Todo esto suma temores a los que están sacudiendo en estas semanas al ciudadano medio alemán. El euro se encuentra atacado por varios flancos, la economía griega se hunde, los países de la Zona Euro aprueban un paquete de 110.000 millones de ayudas a Grecia, dentro de un paquete mayor de 750.000 millones para proteger la economía europea de los ataques monetarios.

¿Quién va a ser el principal pagador? El más fuerte: Alemania. Precisamente, la portada de Stern tiene el título de "¿Qué pasará con nuestro dinero?". En el fondo, el anagrama del euro hundiéndose en el mar.

Hartos de pasarse todo el día prestando dinero, la opinión que circula por las calles alemanas es que ellos han hecho los deberes pero otros países no los han hecho. De ahí que muchos alemanes añoren los tiempos en los que tenían un marco poderoso, y no tenían que preocuparse si otros países estaban en malas condiciones. Como ahora forman parte del euro, forman parte del problema, y tienen que aportar la solución.

Pero a los alemanes no les hace gracia la irresponsabilidad de otros países y por eso el gobierno de Angela Merkel quiere que se aprueben castigos para los países que se porten mal: que pierdan su derecho de voto en el consejo, por ejemplo, si no son capaces de controlar sus déficits.

La meta del gobierno alemán es defender el euro a toda costa porque como decía Angela Merkel, si el euro desaparece, también desaparecerá la Unión Europa.

Con una tasa de ahorro por encima de la media, el publo alemán tiene en la memoria colectiva dos golpes monetarios: la increíble inflación de los años 20, que arruinó a millones de familias, y la entrada en vigor del nuevo marco de la posguerra, a finales de los años cuarenta.

Pese a ello, han logrado construir una moneda fuerte basada en una economía exportadora, pero Helmut Kohl, les convenció de que había que transmutarla en euros. Le costó mucho convencerles pero al final lo aceptaron.

En la encuesta de Stern, los ciudadanos muestran su preocupación por el euro, y por las deudas que está asumiento el gobierno alemán para ayudar a otros países menos ahorradores. ¿Será capaz el gobierno de soportar eso?, se preguntan. ¿Vale la pena el euro?

Para añadir más temores, un artículo publicado hace pocos días por el rotativo económico Frakfurter Allgemeine Zeitung recreaba el futuro afirmando que, en el 2013, debido a las insoportables tensiones del euro, el continente se dividía en países estables, como Alemania, Belelux y Finlandia, y por otra parte, los menos disciplinados.

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