OPINION

Los anunciantes destinan cada vez más millones a internet: desde pequeños blogs a portales

¿Eres periodista amante de las historias de la calle? ¿Quieres vender juguetes australianos para niños? ¿Te gustaría dar clases de dibujo? En esos tres casos, a lo mejor estás pensando en montar: a) Un periódico de papel para tu barrio. b) Una tienda en una calle llena de familias numerosas. c) Una academia.

No es mala idea pero… ¿y si lo haces solo en internet?

No solo te ahorrarás muchos gastos sino puedes conocer una vía de ingresos segura: la publicidad de los anunciantes.

El año pasado, los anunciantes gastaron en España casi 900 millones de euros en salir en cualquier cosa digital: periódicos, redes sociales, portales especializados, blogs, tiendas virtuales, venta de juguetes... Esa cifra es cinco veces mayor que la de 2005, según los datos de Infoadex. En aquel año, las empresas sólo aflojaron 162 millones de euros para internet. No había tanta fe.

Ahora sí. Internet es el medio que aumenta sin parar cada año en inversión publicitaria. Es el único medio que aumentó en 2011. Prensa, radio, televisión, exterior (vallas), revistas y cine cayeron. En 2011, internet estaba a un paso de superar a la prensa diaria de papel en atracción publicitaria. La prensa tradicional capta el 17,6% de la inversión. Internet, el 16,3%.  Por ahora...

¿Qué significa esto? Que este año internet será, junto con la televisión, el medio preferido por los anunciantes para vender sus productos, dar a conocer sus marcas, lanzar campañas. La prensa diaria tradicional quedará en tercer lugar pues cada año hay menos anunciantes en sus páginas debido a que tienen menos lectores. La prensa digital, en cambio, tiene cada año más lectores.

En EEUU, el año pasado, internet superó a la prensa diaria en inversión: 18.500 millones de euros, con un crecimiento del 13,9%. (en España crece en cifras similares, 12,6%)

Es muy posible que este año la inversión en Internet alcance los 1.000 millones de euros. A pesar de la crisis, el crecimiento no se detiene. Los móviles, las tabletas, los nuevos televisores, van a hacer que internet esté en nuestra vida más presente que la comida. La tecnología va a ser el gran empujón.

Por eso, lo importante no es saber de dónde huye la publicidad sino adónde va. Irá a los portales digitales como lainformacion.com, pero también a blogueros especialistas en cine clásico, a portales especializados en bebés, a emprendedores que monten academias de enseñanza por la red, a redes sociales, y a una miriada de proyectos que pueden estar naciendo en este mismo momento. Irán adonde vaya la gente.

Esa es la ola. Quien no tenga tabla para surfearla se quedará de espectador en la playa.

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