Maduro tiene sobre sus espaldas la muerte de 28.000 venezolanos

Cada fin de semana, mueren asesinadas erre 40 y 50 personas en Caracas. Sus cadáveres se apilan en la morgue (foto de arriba). El 90% de los crimenes permanecen impunes.

El año pasado, casi 28.000 personas fueron asesinadas en Venezuela, según el Observatorio de la Violencia de Venezuela. El año más cruel de la guerra de Irak murieron menos personas. Es decir, en Venezuela muere más gente al año que en una guerra.

Lo que hay hoy en Venezuela es una guerra. Es una guerra civil en la que se asesinan a policías, a ladrones, a sicarios, a niños, a estudiantes, a militares, a ricos y a pobres... Todos pueden caer bajo las balas. El fin de semana pasado, un grupo de delincuentes entró en un puesto de la  Guardia Nacional y asesinó a uno de sus miembros. Murió además un bebé en brazos de su madre por una bala perdida.

Ese fue el fin de semana más violento del año en Caracas: 57 asesinatos.

Antes de que los chavistas llegaran al poder, en Venezuela morían asesinadas 4.000 personas al año. No era un país seguro. Tras 17 años de chavismo, la cifra se ha multiplicado hasta suponer tres asesinatos al día. Es uno de los países donde menos se respeta la vida y donde montar una funeraria es un negocio boyante.

Si el estado no es capaz de garantizar el derecho más elemental de los ciudadanos que es la vida, es que no hay estado. No funciona. Maduro le echa la culpa a la guerra económica, a los fascistas, a los opositores...

Un presidente honesto pediría perdón por haber sido incapaz de defender a los venezolanos. Maduro no ha sido capaz de defender a los pobres. La mayor parte de los que mueren son pobres. Y les asesinan otros pobres que han robado el arma a un policía pobre. El 90% de las muertes suceden en las zonas más modestas del país.

El número de víctimas es tan elevado que el gobierno prohíbe hablar de ello. Prohíbe que se tomen fotos del interior de la morgue  (aunque sea con la cara borrada) y hasta multa a los medios que lo hacen. Prohíbe a la ONG que recoge esos delitos que informe a la prensa.

Si alguien de los prochavistas españoles todavía duda de que Maduro es un inútil, que haga la prueba de la sustitución: imaginen a su político preferido como presidente de un país donde se asesinan 28.000 personas al año. ¿Le votarían ¿Le echarían del poder?

Echarle es lo que pretende hacer la nueva asamblea que se formará en Venezuela la semana que viene. A Maduro se le podría hasta acusar de criminal por haber permitido tamaña carnicería. Y enviarlo a la cárcel.

PD: según el Ministerio del Interior, en España se cometen cada vez menos crímenes. En 2013, fueron poco más de 300.