Todo lo que debemos a los británicos (a pesar del peñón de Gibraltar)

La relación histórica de los británicos con los españoles está ahora candente debido a la salida de Reino Unido de la UE y al impacto en Gibraltar.

Ahora se ha reactivado la cuestión de Gibraltar porque, al salirse se la UE (cosa que sucederá gradualmente en dos años), la UE ha dicho que si Reino Unido quiere negociar el tema de Gibraltar, la opinión dominante debe ser la española.

Esto ha suscitado una serie de declaraciones, algunas muy simpáticas en Twitter, y otras bastante provocadoras de políticos británicos contra España. Todo lo cual puede enturbiar la relación de dos países que son europeos y que se deben mucho el uno a otro.

Me gustaría recordar algunas cosas que han pasado entre los dos países a lo largo de la historia, y qué debemos a los británicos.

Hemos compartido matrimonios de casas reales desde la Edad Media, empezando por Alfonso VIII de Castilla, y Leonor de Inglaterra en 1170, y terminando con el matrimonio de Alfonso XIII con Victoria Eugenia Battenberg, que ocurrió en 1906, y que obligó a la noble de origen escocés a abandonar el protestantismo y abrazar el catolicismo. Victoria Eugenia está enterrada en El Escorial. Era la bisabuela del actual rey Felipe VI.

Los británicos y los españoles pelearon en el siglo XVI en varias guerras que han quedado en el inconsciente colectivo. El conocido desastre de nuestra Armada Invencible, pero también las derrotas de la armada inglesa y la de Drake, que para España era un simple pirata.

Los británicos ayudaron a España en la Guerra de Sucesión, aliándose con los borbones. Y también fueron grandes aliados de España en la Guerra de Independencia contra Napoléon. Apoyaron a la reina Isabel contra los carlistas, y se mantuvieron neutrales en la Guerra Civil, en teoría, porque España fue neutral en la Primera Guerra Mundial.

La última vez que sostuvimos una guerra contra Gran Bretaña fue en la guerra egipcio-otomana de 1839 a 1842, hace más de 170 años. Fue por el control de Siria, por cierto.

El punto de fricción actual es Gibraltar. En 1713 perdimos Gibraltar, que es una colonia británica. La verdad es que, en las encuestas del CIS, los españoles no muestran un interés enorme por recuperar Gibraltar, pero eso no quiere decir que se considere un territorio perdido. Es una colonia. Debería volver a manos españolas.

Y ahora, solo para mantener la memoria fresca, quiero recordar algunos datos actuales sobre los británicos: el mayor número de turistas que visita España viene de Reino Unido. El año pasado vinieron 17,8 millones de británicos, lo cual supuso un 13% más que el año anterior, y batió todos los records a pesar del Brexit.

Eso supone para España un ingreso en divisas enorme. Además, los británicos son los mayores compradores de propiedades turísticas en España, y tenemos una gran colonia de pensionistas que cobran su pensión aquí, y disfrutan de sol, playa y chiringuitos. Ah, y se benefician de uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo: el español. Nosotros no solo sabemos poner copas y tapas, sino poner inyecciones y hacer operaciones quirúrgicas.

Las cifras indican que hay 300.000 británicos residentes en España. Muchos de ellos están asustados. Han perdido un 17% de sus ingresos debido a la caída de la libra, y no saben qué pasará cuando pierdan la condición de ciudadanos de la UE.

Eso puede suponer un golpe importante para la economía de las zonas más turísticas de España, especialmente, para Canarias, Andalucía y Valencia. ¿Y saben qué?  El 83% de los británicos asegura que el Brexit no les supondrá un obstáculo para pasar sus vacaciones fuera del país, según un estudio de Wanup.  Esperemos que sigan llegando a España.

La balanza comercial (intercambio de bienes y servicios) entre los dos países es favorable a España. Ellos tienen un déficit comercial con nosotros de 7.806 millones de euros, según datosmacro.

Muchos españoles han podido salir y encontrar trabajo en Reino Unido. No estoy hablando de todos los estudiantes que han aprendido inglés en ese país, sino de los profesionales que han sido acogidos por los británicos, especialmente en el sistema sanitario. Exportamos muy buenos enfermeros y muy buenas médicos.

La balanza por cuenta corriente, que se compone del intercambio comercial y además pagos, inversiones y créditos, siempre ha resultado favorable a España debido a la cantidad de británicos que viene a gastar sus ahorros o sus pensiones en España por turismo o por residencia.

España es también un gran inversor en Reino Unido, pues según el Banco de España, tenemos activos valorados en mas de 15.000 millones de euros (cifras de 2014).

De modo que antes de echar pestes sobre los británicos, habría que pensar lo que los británicos han hecho por los españoles. Con la salida de la UE, ya tienen un problema muy gordo, que se irá viendo a medida que pasan los años.

Uno de esos problemas es que las grandes multinacionales y los grandes inversores están pensando instalarse en otros países. España es uno de esos terrenos para aterrizar. Pero a mí me da un poco de vergüenza ver a las ciudades españolas compitiendo para atraer capitales británicos, pues es como si nos estuviéramos repartiendo la herencia del abuelo, cuando todavía está en el lecho.